*El problema de la corrupción como el de la improvisación en el Sistema Nacional de Salud es atribuible al tráfico de influencia y venta de plazas de los dirigentes nacionales y seccionales del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud (SNTA).
*La inocultable corrupción en el Sistema Nacional de Salud, se agrava por la pública y notoria incompetencia de los funcionarios de la Cuarta Transformación como el presidente de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, José Alfonso Novelo.
A raíz del desabasto de Metotrexato en el Hospital Infantil de México “Federico Gómez” (HIMFG) y la protesta pública de los padres de pacientes con problemas oncológicos, afloró la criminal crisis humanitaria en el Sistema Nacional de Salud.
Esta crisis, no es más que resultado, por un lado, del colapso financiero del sector salud nacional, como resultado de la escandalosa corrupción y, por otro lado, de la imposición de funcionarios y personal médico y paramédico, improvisados.
El problema de la corrupción como el de la improvisación en el Sistema Nacional de Salud es atribuible al tráfico de influencia y venta de plazas de los dirigentes nacionales y seccionales del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud (SNTA).
La criminal crisis humanitaria generada por el desabasto de metotrexato en el Hospital Infantil de México “Federico Gómez”, que ha provocado la muerte de niños con cáncer, es solo la punta del iceberg del colapso del sector salud, que requiere urgente atención.
Desde junio disminuyó la distribución del Metotrexato, medicamento indispensable para el tratamiento de leucemia o el osteosarcoma. Cofepris mantiene detenida la distribución necesaria para atender a más de 300 niños con cáncer.
La inocultable corrupción en el Sistema Nacional de Salud, se agrava por la pública y notoria incompetencia de los funcionarios de la Cuarta Transformación como el presidente de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, José Alfonso Novelo.
Parte del problema, efectivamente, se encuentra en la restricción de la Cofepris contra la empresa Pisa —principal encargada de surtirles el medicamento—, por una queja que no tiene que ver con la calidad del mismo producto farmacéutico.
Aunque el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se comprometió a apoyarlos con medicamentos para satisfacer sus necesidades por cerca de dos semanas, sin embargo, los fármacos no llegaron al Hospital Infantil de México “Federico Gómez”.
Las familias de los pacientes no sólo señalan de incompetencia en la materia de salud a Novelo, de Cofepris, sino también al titular de Salud, Jorge Alcocer, Zoé Robledo, director del IMSS; Luis Antonio Ramírez del ISSSTE; Juan Ferrer del Seguro Popular y hasta al Consejo de Salubridad General.
Llega a tal extremo la insensibilidad de las autoridades del HIMFG que el Dr. Luis Juárez, Jefe de Oncología, señaló en conferencia de prensa que los pacientes no morían precisamente por tener cáncer, sino que fallecían por eventos asociados, como procesos infecciosos, lo cual en cierto modo es cierto. La pregunta oficiosa es: ¿Entonces, nadie muere de cáncer?
Pero aún hay cosas peores como que en el HIMFG, no se respeta el protocolo de prevención de infecciones: lavado de manos, aislamiento, tránsito humano mínimo, cuidado especial de catéteres, aseo del sitio físico por lo menos cada 6 horas, y de poderse hasta flujo laminar y otras medidas.
La verdad, es por demás evidente que el tránsito de gente no está controlado, entran vendedores, luchadores profesionales y hasta payasos para “arrancarles” una sonrisa a los pacientes y a veces lo que les arrancan es la vida al introducir gérmenes nocivos.
Entonces, le exigen a Infectología que los cubra con antibióticos de alto espectro y antifúngicos, que obviamente son extremadamente caros y los responsables de la Dirección de Administración que los compra se ponen felices, porque el porcentaje que reciben será mayor.
Lo que tampoco señalan las autoridades del Hospital infantil de México “Federico Gómez” como el Jefe de Oncología, Dr. Luis Juárez, es que si seaplican antibióticos de alto espectro y antifúngicos, se presiona al paciente y sobrevienen las superinfecciones.
Es la permanente discusión de los médicos con las autoridades hospitalarias, porque con justa razón los galenos sostienen que no ha perdido vigencia el dicho que más vale prevenir que remediar y encima sale más barato.
El Director de Administración, Carlos R. Plascencia Pacheco, señaló por su parte a los medios que tenían unos “ahorritos” para la adquisición del fármaco, pero que no se concretó la compra por desabasto y culpó a los laboratorios Pisa.
A este sujeto lo que le tenían que haber preguntado es cómo desviar y robar recursos del erario federal, en eso tiene maestría y doctorado. Actualmente está bajo investigación por la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
A su vez, la Directora Médica, Dra. Mónica Villa Guillén, se quedó pasmada y no contestó las preguntas que se le plantearon, demostró su poco tacto y pericia para manejar el problemadel desabasto de Metotrexato en el Hospital Infantil de México.
Su falta de oficio fue notoria y evidente, la habilidad y el estilo brillaron por su ausencia, lo que ocurre cuando se impone a improvisados en los cargos, por méritos no muy claros, generalmente tráfico de influencia o venta de plazas en el sector salud nacional.
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