07:41 La economía mexicana creció 4.3 por ciento en el primer trimestre del año; sin embargo, esto apenas representa recuperar la mitad de lo perdido en el periodo enero-marzo de 2009, periodo crítico de la recesión económica.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el primer trimestre de 2008 el producto interno bruto (PIB) tenía un valor de 8.6 billones de pesos, el cual se redujo 12 meses después por la fuerte recesión productiva a 8 billones, lo que significó una pérdida anualizada de 684 mil millones de pesos.
Para el primer trimestre de este año, su valor es de 8.3 billones de pesos, es decir logró recuperar 344 mil 500 millones de pesos (50.3 por ciento).
Otro indicio de la recuperación incompleta es que en términos desestacionalizados, el país registró un descenso de 0.35 por ciento en los primeros tres meses del presente año, con lo que se rompió una racha de tres periodos consecutivos al alza.
“Con ello se frenó la recuperación observada durante los tres trimestres anteriores; las cifras muestran una pausa en la recuperación económica luego de un fuerte repunte en la segunda mitad de 2009”, mencionó el analista económico de Banamex, Eduardo González.
“Todavía no se puede cantar victoria de que todos los sectores económicos, el empleo, ingresos y bienestar de la gente estén recuperándose, aún hay focos amarillos en la parte externa y principalmente en el mercado interno”, dijo el director del Centro de Investigación en Economía y Negocios del Tecnológico de Monterrey, José Luis de la Cruz.
Al detalle el INEGI indicó que las actividades secundarias (industria) registraron un crecimiento de 5.4 por ciento entre enero y marzo de 2010.
El informe resaltó el crecimiento en la industria manufacturera, la cual repuntó 9.9 por ciento; la actividad minera 3.9 por ciento; electricidad, agua y suministro de gas, productos al consumidor final, 1.7 por ciento.
El contraste se registró en la construcción, que se redujo 3.8 por ciento, con lo que suma seis trimestres consecutivos con caídas.
Las actividades terciarias (servicios) aumentaron 3.8 por ciento, impulsadas por el favorable desempeño del comercio, transporte, servicios inmobiliarios, de salud y asistencia social.
Finalmente, el PIB de la actividad primaria (agricultura y ganadería) se contrajo 1.5 por ciento en el periodo, como consecuencia del decremento en la agricultura y un aumento en la ganadería. Esta es la primera vez que este sector observa cifras negativas, desde el primer trimestre de 2008.
“El crecimiento del PIB de 4.3 por ciento hay que tomarlo con reservas, es positivo y refleja una recuperación, pero está cimentado en un factor estacional y la mejora del mercado doméstico sigue pendiente”, advirtió De la Cruz.
Milenio