Dedicado a la memoria de mi madre, una oaxaqueña que aspiraba a un mejor país
A raíz de la crisis económica internacional, iniciada en los EE.UU., la economía mexicana retrocedió un 6.1% en el 2009, fue una de las economías de América Latina más afectadas, esto por la gran dependencia que tienen las industrias manufactureras mexicanas con respecto al ciclo económico de nuestro vecino del norte. Las previsiones a principios del 2010 eran que la economía se recuperaría muy lentamente de la caída, particularmente las entidades de la frontera norte, que son las más enlazadas con el mercado americano. Las cosas, afortunadamente, resultaron mejor de lo estimado y la actividad económica consolidó su recuperación, al finalizar el 2010 la economía mexicana había crecido un 5.5%.
En el 2009 el comercio exterior fue el principal determinante de la recesión y para el 2010 fue el motor principal del crecimiento. Las exportaciones totales aumentaron 29.8% en el 2010, después de presentar una caída de 21.1% en 2009. El sector exportador manufacturero y en especial el vinculado a la industria automotriz fue el más dinámico, lo que colaboró con el crecimiento económico de las entidades federativas con alta vocación manufacturera vinculada al exterior.
De acuerdo con información dada a conocer en el documento: “México. Indicadores regionales de actividad económica 2011”, publicado por Banamex-Citi, en el 2010, a nivel estatal, la recuperación se observó en casi todas las entidades federativas, con la excepción de Campeche. Para el 2011, el documento indica que se espera que los motores del crecimiento económico sean más balanceados, con un repunte en actividades vinculadas al mercado interno, como las ventas, la construcción y la continua recuperación del mercado laboral. En consecuencia se espera que los estados muestren tasas de crecimiento más homogéneas, bajo la premisa de un crecimiento nacional del 4.8%.
A partir de la información que se publicó en el documento antes citado, tres entidades registraron crecimiento de dos dígitos en 2010: San Luis Potosí (15.8%), Coahuila (14.3%) y Guanajuato (11.8%). La razón de este notable dinamismo se encuentra en la industria manufacturera y particularmente en la producción de equipo de transporte. Durante el 2010, la producción manufacturera en equipo de transporte creció más de 60% en San Luis Potosí y Coahuila, en tanto que en Guanajuato lo hizo en 35% (Fuente: INEGI).
En el extremo opuesto se encuentra el estado de Campeche que fue el único que registró una variación negativa del PIB durante 2010, las estimaciones de Banamex-Citi son de -3.1%. La razón de esto se encuentra en la elevada dependencia que la entidad tiene del petróleo. El 83% del PIB estatal proviene de la minería, sector dentro del cual se encuentra la actividad de extracción de petróleo; de esta forma, Campeche se mantiene al margen de ciclo económico nacional. Ésta entidad es la única que ha registrado variaciones negativas del PIB del 2004 al 2010, lo que se explica por el deterioro de la inversión en la industria petrolera.
La recuperación del sector exportador manufacturero en 2010 es una de las razones por las cuales han crecido las entidades federativas con alta vocación exportadora como: San Luis Potosí (15.8%), Coahuila (14.3%), Guanajuato (11.8%), Puebla (9.3%), Aguascalientes (8.7%), México (7.7%), Querétaro (7.2%), Nuevo León (6.2%) y Jalisco (5.0%). Aunque también crecieron de forma importante entidades menos orientadas a la exportación manufacturera como: Chiapas (9.5%), Tabasco (7.7%), Yucatán (7.6%), Nayarit (7.3%), Colima (6.8%), Morelos (6.8%), Tlaxcala (6.0%) y Oaxaca (5.7%).
Aparte de Campeche (-3.1%), otras entidades con un muy bajo crecimiento del PIB en 2010 fueron: Tamaulipas (0.3%), Quintana Roo (1.4%), Guerrero (2.0%), Sinaloa (2.8%) y Veracruz (2.9%). Con un crecimiento medio bajo se tuvo a: Michoacán (4.7%), Baja California Sur (4.3%), Durango (4.1%), Chihuahua (4.1%), Sonora (3.8%), Hidalgo (3.8%), Baja California (3.6%) y Distrito Federal (3.6%).
Por cierto, es importante anotar que aquellas entidades que crecieron de forma importante en 2010 no lo hacen únicamente como parte de un “efecto rebote”; es decir, los estados que mostraron las mayores caídas del PIB en 2009 no fueron necesariamente los que más crecieron en 2010. El caso de Chiapas es bastante ilustrativo a este respecto, su crecimiento obedece al impulso otorgado por la producción de electricidad y el dinamismo de la industria de la construcción.
Para el 2011 se espera que siga prevaleciendo el dinamismo, aunque a una tasa menor a la observada en 2010. Como resultado de un mejor escenario de crecimiento económico, se espera que el empleo formal se incremente 4.9% en 2011 contra un 3.8% en 2010. Las entidades que en este año tendrán el mejor crecimiento serán: Coahuila (5.7%), Nuevo León (5.6%), Aguascalientes (5.5%), Querétaro (5.4%), Puebla (5.4%), Chihuahua, Distrito Federal y Baja California (5.3%) (Observe que cuatro están en la frontera norte).
Para Oaxaca se pronostica una tasa de crecimiento económico del 4.2% en 2011, casi dos puntos porcentuales menos que el año anterior y ahora por debajo del promedio nacional, la razón de esta contracción en el dinamismo se encuentra en la postergación de reformas que son cruciales para el fomento económico en Oaxaca como la estabilidad política, el respeto al estado de derecho, el combate a la informalidad, la atracción de empresas manufactureras, la mejora de la infraestructura de transporte y comunicaciones, la mejora del sistema educativo, la inversión en ciencia y tecnología, la transparencia en la administración pública y el respeto a los derechos de propiedad.
Si lo deseas, sígueme en twitter:
* Doctor especializado en estudios regionales y profesor-investigador de la UACJ