En contra del abuso laboral y la indiferencia oficial se pronunció el presidente de la Comisión Sur-Sureste del Senado de la República, Benjamín Robles Montoya, en la conmemoración del Día del Trabajo y luego del encuentro que tuvieron una comisión plural de legisladores federales con los jornaleros agrícolas de San Quintín.
Estos hombres y mujeres, dijo, sólo piden lo que les corresponde: ser tratados como seres humanos libres y no como jornaleros víctimas de una doble desgracia: la esclavitud laboral y la indiferencia de sus compatriotas.
“En la Comisión Sur Sureste en particular tenemos una línea de acción muy concreta para fomentar el trabajo y el empleo, como herramienta para impulsar el desarrollo de las comunidades y el sustento de las familias: Trabajo para cambiar, para mejorar y no sólo trabajo para sobrevivir y superar el día”, manifestó el legislador oaxaqueño.
Por lo tanto, enfatizó que hoy es un buen momento para comprometerse a seguir, desde la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) —y desde los escaños de otras formaciones políticas—, a seguir buscando oportunidades para lograr un objetivo más alto que cualquier militancia partidista: que el trabajo sea por fin realización intelectual, elevación espiritual, expresión de la fortaleza humana.
Asimismo, lamentó que sean recurrentes las historias de niñas y niños que abandonan las escuelas y se internan en el Trabajo Infantil, a veces en condiciones peligrosas, sin ninguna consideración, sin ninguna defensa. Son 2 millones y medio en México.
“Son millares de familias que se condenan con ello a la falta de educación y a la pobreza permanente”, señaló.
Sin embargo, también mencionó que es el día de reconocer algunos avances sustanciales en materia laboral, como Ley, aprobada por este Senado de la República, para obligar a los sindicatos a abrir sus cuentas y transparentar su proceder. Porque es cierto que no son pocos los casos en que los trabajadores sufren un doble abuso: el de los patrones y el de sus gremiales.
Hay que reconocer, dijo, que hace algunas semanas, también el Senado de la República aprobó la ratificación del Convenio 138 de la Organización Internacional del Trabajo, por medio del cual se abole la esclavitud infantil y eleva la edad mínima de admisión al empleo.
“Que el trabajo sea un espejo de la grandeza que somos como especie y, por lo tanto, nos refleje cada vez más dignos de la confianza de nuestros hijos, de nuestras familias, del México estable y en paz que anhelamos todos”, concluyó el senador Benjamín Robles.