La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) arrastra un rezago en el reparto de televisiones digitales, lo que complica el apagón analógico.
A dos meses de la fecha prevista para el fin de la señal análoga, aún faltan 2.8 millones de aparatos por entregar a nivel nacional, según datos de la propia SCT.
En Chiapas, una de las entidades con más pobreza en el País, sólo han sido repartidos dos televisores, cuando la meta son 900 mil, mientras que en Campeche y Tabasco no han entregado ni uno solo.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) no puede programar un apagón en tanto la SCT no le comunique que ha repartido el 90 por ciento de las televisiones a beneficiarios de la Sedesol.
Analistas señalaron que el programa estaba mal diseñado, pues implica tres órganos para ser ejecutado: el padrón de la Sedesol, la entrega de aparatos por parte de la SCT y el fin de la señal análoga por el IFT.
“Son muchos aparatos de televisión por repartir. Estamos casi en noviembre”, lamentó Aleida Calleja, coordinadora del Observatorio para Latinoamérica sobre Regulación, Medios y Convergencia.
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