Durante su pasada campaña por alcanzar la gobernación del estado, el hoy gobernador electo Gabino Cué Monteagudo, se comprometió a implementar una serie de acciones sociales en beneficio de la población más vulnerable; que en el caso de Oaxaca son la inmensa mayoría dadas las condiciones de pobreza y de marginación que décadas de malos gobiernos han generado. Programas como la aplicación gratuita de la vacuna contra el papiloma humano, uniformes para estudiantes en niveles básicos, apoyos para las madres solteras y el apoyo de setenta y más para los adultos mayores, fueron inmediatamente aceptados por la ciudadanía que veía –ve, debo escribir— con optimismo un gobierno comprometido con las causas más necesitadas del estado.
No fueron pocas las ocasiones en la que el próximo Gobernador constitucional del estado explicaba sus propuestas, teniendo como testigo de honor a un estadista que ha demostrado con hechos que las políticas sociales de gran impacto son posibles, me refiero al Jefe de gobierno del Distrito Federal, Lic. Marcelo Ebrard. Recuerdo que fueron al menos tres visitas en fines de semana, o sea cuando su tiempo se lo permitía, cuando Marcelo Ebrard presenció los actos multitudinarios con los que era recibido el candidato de la coalición “Unidos por la paz y el progreso”; incluso, en Juchitán se animó a vaticinar el triunfo “holgado” de Gabino Cué y con ello las bases para la transición democrática en Oaxaca.
Pero como el cambio va en serio y Gabino Cué sabe cumplir sus promesas, el pasado miércoles en el antiguo Palacio del Ayuntamiento de la capital de la republica se firmó un convenio de colaboración entre el gobierno electo de Oaxaca y el gobierno en funciones del Distrito Federal, mismo que operará a través de una “Comisión Mixta” encabezada por ambos jefes de gobierno y cuyo propósito es aprovechar los programas exitosos que se han tenido en la Ciudad de México, para aplicarlos en Oaxaca. Durante su intervención Gabino Cué expresó lo siguiente: “Siempre quisiéramos aplicar muchos programas que lleguen a la gente, el problema a veces es el recurso, pero siempre las buenas experiencias hay que tomarlas en cuenta y por eso venimos el día de hoy aquí a la Ciudad de México. Oaxaca es un estado con la más alta tasa de marginación y qué bueno que el gobierno de la Ciudad de México, siendo la entidad de mayor producto per cápita, pueda colaborar, ayudar y orientar en su caso a un gobierno que empieza. Marcelo Ebrard es sin duda un gran amigo de Oaxaca, lo ha demostrado muchos años y hoy con esta firma de este convenio de colaboración, sin duda, se ratifica un compromiso con el pueblo y gobierno del estado de Oaxaca” enfatizó.
Por su parte Marcelo Ebrard manifestó lo siguiente: “en Oaxaca se han perdido demasiados años, el país tiene una deuda histórica con Oaxaca, uno de los estados a los que más le debe el país y que menos ha avanzado en los últimos años. Sin embargo se logró la proeza de derribar un gobierno de 80 años, por lo que nuestra administración será solidaria y apoyará el esfuerzo de cambio en Oaxaca.
Cuenten con la Ciudad de México para que Oaxaca salga adelante”, ofreció el jefe de Gobierno del Distrito Federal.
En la integración de la Comisión Mixta, sobresalen por parte del gobierno del Distrito Federal, el que sin duda es el oaxaqueño más próximo al jefe de gobierno, a grado tal que durante la firma del convenio de colaboración estuvo sentado a su derecha y fue designado su enlace, me refiero al subsecretario de Políticas públicas del DF, Lic. Alberto Esteva Salinas. Pero también integran dicha comisión los secretarios de Turismo, Finanzas, Salud y Educación Alejandro Rojas, Armando López, Armando Ahued y Mario Delgado, respectivamente. Mientras que por el gobierno de Oaxaca se designó al diputado y secretario técnico del equipo de transición, Benjamín Robles Montoya, al jefe de oficina y experimentado político, Alfredo de la Rosa Chávez, al Lic. Jorge Castillo, al Lic. Alberto Vargas y al prestigiado galeno Germán Tenorio.
La firma del convenio de colaboración y la conformación de la Comisión Mixta es sin duda una excelente señal de que el gobierno que asume funciones dentro de 22 días habrá de impulsar políticas públicas con un alto contenido social que permita revertir decididamente la situación apremiante por la que atraviesan miles de familias oaxaqueñas. Fueron por esas propuestas por las que la ciudadanía votó abrumadoramente el pasado 4 de julio, es por ello que resulta una magnífica señal el proyectar que todas y cada una de las ofertas de campaña se desarrollarán no desde el primer día de gobierno de Gabino Cué, sino como lo estamos corroborando, desde antes. Sin duda que la estrecha colaboración entre ambos gobiernos sólo puede augurar beneficios tangibles inmediatos para los oaxaqueños más vulnerables a la actual situación económica. No es el único rubro; pero también en materia de justicia, de desarrollo económico, de seguridad, de transparencia y rendición de cuentas, los oaxaqueños debemos estar seguros que se cumplirán con las expectativas generadas.
Por cierto que en los próximos días Marcelo Ebrard estará en nuestro estado para la presentación de la Fundación “Equidad y Poder” (EQUIPO), para enseguida encabezar los trabajos del “Congreso Mundial de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos” que de se desarrollará del 16 al 21 de éste mes en la ciudad de México, donde se espera la participación de Presidentes Municipales y Alcaldes líderes de los cuatro continentes y en donde estarán representadas más de 4000 ciudades. Por cierto, varios Presidentes Municipales del estado acudirán invitados por el gobierno del Distrito Federal.
Afortunadamente hoy vemos que en Oaxaca se comienza a hacer lo que no se hizo por años, como lo es la colaboración real entre gobiernos y el aprovechamiento de ejercicios exitosos implementados en otras entidades. De haberlo hecho así, hoy los oaxaqueños no estaríamos viviendo lo que con indignación vemos nos deja la actual administración: caos y más caos. Lo bueno es que ya falta menos para el cambio.