Juchitán de Zaragoza.- En el marco del 51 Aniversario Luctuoso del General de División, Heliodoro Charis Castro, el diputado federal, Samuel Gurrión Matías, colocó una ofrenda floral al pie del monumento que fue erigido a la entrada de este municipio en el Istmo de Tehuantepec.
Como cada año, el legislador federal acompañado del ex presidente de Juchitán, Daniel Gurrión así como del secretario general de la Federación Regional de la CTM, Tomas López Pineda; el dirigente de la Fundación “Colosio”, Mauro Toledo Vicente; Virginia Calvo López, y del presidente de la colonia Los Pinos, Ulises Gómez, recordaron a uno de los héroes más importantes de la Ciudad de Juchitán.
El Coordinador de Diputados de Oaxaca en la LXII Legislatura Federal, dijo que hace 51 años se perdió a un hombre con una gran calidad moral, oriundo de Juchitán de Zaragoza, quien dejo una gran legado a las futuras generaciones.
Destacó que el General de División, Heliodoro Charis, a pesar de su escasa preparación académica y su origen humilde “tuvo la virtud de ver hacia el futuro, y le apostó sin dudar a la lucha y defensa de su pueblo desde los diversos puestos políticos que tuvo”.
Es por ello, que refirió que cada año recuerdan al General Charis, al ser la mejor manera de traer a la memoria a este gran hombre que ha trascendido en el tiempo por su participación en la historia política de México, y que el mundo debe conocerlo por haber sido un gran luchador social por su pueblo.
“Un merecido reconocimiento al General Charis, quien siempre tuvo presente a su familia y al pueblo de Juchitán, y por hacer muchas cosas a favor de su gente ya que gestionó escuelas, pavimentación, ayuda médica, entre otras acciones más“, finalizó Samuel Gurrión.
Cabe destacar que el Gral. Heliodoro Charis era de origen indígena y humilde, a la edad de 15 años se da de alta en el ejército revolucionario, en la Decena Trágica, y se levanta en armas en contra de Victoriano Huerta junto a José F. Gómez.
Fue Diputado Federal de 1926 a 1928 por el 17º distrito electoral de Oaxaca, y Senador de 1940 a 1946. Una vez retirado del servicio activo del ejército en Querétaro a mediados de 1931, se dedicó con contagioso entusiasmo a la política y a la agricultura.