Colapsados hospitales ISSSTE; todo el apoyo a los cubanos: Alfredo Martínez de Aguilar

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* La falta de material, insumos y equipo de protección preventiva (EPP) para evitar el contagio del nuevo coronavirus SARS-COV-2-COVID-19 detonó la crisis humanitaria que vive México por el colapso de la red hospitalaria nacional.
* En cambio, los médicos y enfermeras cubanos que llegaron a la Ciudad de México el pasado 27 de abril, gracias a un convenio por 135 millones de pesos mexicanos, 6.2 millones de dólares, no participan en la lucha contra el COVID-19.

 

En medio del colapso del Hospital Regional Presidente Juárez del ISSSTE, ayer falleció el Jefe de Recursos Humanos, Cástulo Pacheco Juvenal, de 43 años. Los contagios están fuera de control.

El lunes de la semana pasada, el funcionario inició con fiebre y molestias. El pasado día lunes 8 acudió al hospital con prueba COVID-19 positiva, en mal estado general y fue hospitalizado.

En apoyo del Director Jesús Gonzalo López, Cástulo se negó a apoyar a los trabajadores en sus justas demandas de material, insumos y equipo de protección preventiva, para evitar contagios.

La realidad del HRPJ del ISSSTE es dantesca. Tienen 30 contagiados y sólo 13 ventiladores; 10 intubados, 10 con apoyo de ventilador y 10 más en observación, más los que se acumulen.

No obstante tener una cobertura de miles de trabajadores federados sólo se han practicado 300 pruebas, que representan apenas el 17%, lo que no permite planear ni hacer pronósticos.

Tras sostener oficinas centrales al Director Jesús Gonzalo López, a pesar del rechazo de la base laboral, perdió autoridad y le insultan. Salvo la Subdirectora Ivonne Pérez, nadie le hace caso.

Uno de los mayores problemas es que con todo y ser oaxaqueño al Director General nacional del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez Pineda, no le importa apoyar a los trabajadores en Oaxaca. 

Si alguna peculiaridad nefasta, por negativa, caracteriza al gobierno de la 4T es el maniqueísmo hipócrita. La típica actitud de la doble moral de los incongruentes, simuladores y farsantes.

Veamos si no es así. La austeridad impuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, pronto se convirtió en pobreza franciscana y terminó en “austericidio” que mata a México.

Es un proceso de creciente destrucción del sistema nacional de salud. La primera crisis fue por falta de medicamentos para niños con cáncer, agravada por la desaparición del Seguro Popular.

Pero la falta de equipo de protección preventiva (EPP) para evitar el contagio del nuevo coronavirus SARS-COV-2-COVID-19 detonó finalmente la crisis humanitaria que vive México.

La gota que derrama el vaso en el sistema nacional de salud es el colapso aún no reconocido de la red hospitalaria nacional, por la sobresaturación del creciente número de pacientes contagiados.

En cambio, se trajo a un total de 585 médicos cubanos para supuestamente colaborar en los hospitales COVID de la capital del país y apoyar las acciones que hacen frente a la pandemia.

Los médicos y enfermeras cubanos llegaron a la Ciudad de México el pasado 27 de abril, gracias a un convenio por 135 millones de pesos mexicanos, equivalentes a 6.2 millones de dólares.

La secretaria de Salud de la CDMX, Oliva López Arellano, dijo que el convenio incluye el sueldo y actividades de capacitación, especialización, atención directa, asesoría e investigación conjunta.

A los médicos cubanos se les hospeda en hoteles, se les da alimentos, transporte cómodo y seguro a los hospitales, no atienden pacientes y se les paga más que a los médicos mexicanos. ¿Acaso hay médicos cubanos de primera y médicos mexicanos de segunda?

Con el paso de los días crecen las insistentes versiones que la misión de los médicos cubanos no es apoyar el combate contra la pandemia del COVID-19, sino adoctrinar en comunismo a organizaciones ligadas a la  4T, para crear comités revolucionarios.

El convenio general que les trajo a México, fue firmado entre el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) a nivel federal, la  Secretaría de Administración y Finanzas de la Ciudad de México y la Secretaría de Salud capitalina.

Ante la falta de apoyo de las autoridades nacionales y locales del ISSSTE, para proteger la salud y la vida de los trabajadores, los médicos del HRPJ interpusieron un Juicio de Amparo contra éstas.

A más de dos meses de poco o nada ha servido solicitar el amparo y protección de la justicia federal, en virtud que persiste la falta de equipo de protección preventiva, insumos y equipo.

Entendible porque el Juicio de Amparo fue enderezado contra el presidente Andrés Manuel López Obrador y el director general del ISSSTE, el oaxaqueño renegado, Luis Antonio Ramírez Pineda.

El pasado miércoles se informó “con tristeza que el día de hoy el servicio de medicina interna del hospital del ISSSTE anunció que llegó a su máxima capacidad de atención de pacientes COVID-19”.

Culpan a la incompetencia de los directivos. “Tienen gran culpa de lo sucedido por falta de organización y protocolos o medidas a destiempo, y la apatía de las autoridades centrales por solucionarlo”.

“El área médica y enfermería es insuficiente y la carga laboral en aumento conlleva al desgaste a corto plazo, turnos donde hay un solo médico y dos o tres enfermeras para 30 pacientes, al menos diez de ellos requieren de mayor atención”.

En tono airado los médicos especialistas reiteran, una vez más, su indignación: “Ya se ha puesto de manifiesto esta situación meses atrás y por lo visto no se tomó ninguna medida”.

“El ISSSTE ha sido abandonado durante la contingencia, hacemos un llamado a la misma derechohabiencia a exigir lo que por ley se les descuenta para recibir atención ya sin hablar de calidad”.

“La situación, por el contrario, va a empeorar por la disminución gradual del personal, el golpeteo anímico y moral, el acoso laboral, la falta de pago, el aumento en los contagios internos del personal”.

“Hacemos un llamado a la opinión pública, a los medios de comunicación y a las autoridades competentes para que volteen a ver esta situación y apoyen, aún no estamos en el pico de la pandemia y la situación está fuera de control”.

“¡Por el derecho a la salud, por el derecho a la vida, cualquier exigencia es válida!”, exclaman en tono más que enérgico los médicos denunciantes, al demandar el apoyo popular en su protesta del próximo 1 de julio.

 

alfredo_daguilar@hotmail.com

director@revista-mujeres.com

@efektoaguila