Diana Méndez
Cocineras tradicionales de los Lunes del Cerro, en su mayoría mujeres de la tercera edad, han denunciado públicamente la discriminación y amenazas que enfrentan por parte de las autoridades municipales y estatales, así como del Comité de Vida Vecinal (Comvive) Guelaguetza. Estas mujeres, que venden sus productos en la explanada adjunta a las escaleras del Cerro del Fortín, cerca del túnel de acceso al Auditorio Guelaguetza, aseguran que han sido intimidadas con violencia si continúan con sus actividades comerciales.
Las cocineras, que llevan décadas trabajando en este lugar, han señalado a Bibiana García Loya, directora de Comercio en Vía Pública del municipio capitalino, como la principal responsable de bloquear los trámites necesarios para obtener los permisos de venta. “Han intentado bloquearnos con todos los medios a su alcance para no permitir instalarnos y no vender en donde lo hemos hecho todos los años”, declararon las afectadas.
Argumentan que después de más de 30 años de utilizar este espacio, las autoridades ahora alegan que es un área verde y, por lo tanto, no debería haber comerciantes. Las cocineras exigen el permiso para vender en el lugar que han ocupado durante años y advierten que, de continuar el hostigamiento y represión, se organizarán para defender su derecho al trabajo digno y honrado que les permite llevar ingresos a sus hogares.
