El acceso al Santuario de Juquila, que es visitado anualmente por casi dos millones 500 mil peregrinos, ha prohibido el acceso de visitantes como medida de prevención y evitar contagios de COVID-19.
Las autoridades municipales establecieron cercos sanitarios sobre la carretera 131 que conduce a la localidad a la altura del Vidrio y una más sobre Río Grande, en donde participa la Guardia Nacional y corporaciones estatales y locales.
El presidente Municipal, Francisco Zarate Pacheco advirtió que sólo se permitirá la salida de los habitantes en casos de suma urgencia.
“Las acciones que estamos tomando es para salvaguardar la integridad de la población”, esto luego de que se denunciara que un grupo de camiones tipo tráiler, provenientes de Puebla, se dirigían en peregrinación a la localidad.
El día de ayer, las autoridades federales declararon emergencia sanitaria por COVID-19, por lo que se extendió hasta este 30 de abril la suspensión de actividades no esenciales.
Las actividades no sólo turísticas sino de fe, dejan al menos 10 millones de pesos anuales en esta Santuario que se ubica en la región de la Costa.
Carina García