Al menos 61 personas perecieron el lunes y 125 resultaron heridas debido a la colisión entre dos trenes de pasajeros en el este de la India, dijeron las autoridades.
La ministra de Ferrocarriles, Mamata Benerjee, consideró posible que la tragedia hubiera sido un acto de sabotaje.
El 28 de mayo, 145 personas perecieron en una colisión y descarrilamiento que las autoridades atribuyeron a rebeldes maoístas.
“Tenemos algunas dudas” en cuanto a que no haya sido un accidente, expresó la ministra, que acudió al lugar del desastre.
El choque ocurrió alrededor de las 02.00 horas, cuando el Expreso Uttarbanga embistió al Expreso Venanchal que salía de la estación de Sainhtia, 200 kilómetros (125 millas) al norte de Calcuta.
La colisión destruyó dos vagones de pasajeros y uno de equipaje. Ambos carros estaban ocupados por los pasajeros con los boletos más baratos, que por lo general atestan los carros.
La fuerza del impacto fue tan intensa que el techo de un vagón salió volando y cayó sobre un puente encima de las vías.
Los socorristas llegaron casi tres horas después de la tragedia, dijeron testigos. Antes que los socorristas llegaran con su equipo pesado para corte de metal, decenas de civiles hicieron esfuerzos desesperados por auxiliar a sobrevivientes.
Los dos maquinistas del Expreso Uttarbanga figuran entre los fallecidos, dijo un funcionario policial.
“Por muchas horas sólo los residentes locales auxiliaron (a los sobrevivientes) y les era difícil hacerlo sin equipo”, afirmó un hombre no identificado al canal de televisión NDTV.
El desastre ferroviario fue el segundo de mayor gravedad de su tipo en los últimos dos meses tras el ocurrido el 28 de mayo en el estado de Bengala Occidental.
La amplia red ferroviaria de India registra accidentes con frecuencia debido principalmente a la falta de mantenimiento.