El presidente venezolano, Hugo Chávez, reivindicó ayer que su partido consiguió la victoria en las legislativas del domingo, al lograr “98 escaños” de los 165 de la Asamblea Nacional (parlamento unicameral), mientras que la coalición opositora afirma que consiguió un mayor apoyo popular, aunque menos escaños.
Según el mandatario, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) consiguió 5.422.040 votos, mientras que la coalición opositora Mesa de la Unidad logró 5.320.175 votos.
Pero según los resultados oficiales difundidos hasta la noche de ayer por el Consejo Nacional Electoral (CNE), el PSUV logró 95 diputados y la coalición opositora de liberales, socialdemócratas y la izquierda moderada en la Mesa de Unidad Democrática (MUD) unos 63 representantes.
Con este resultado, la oposición impide que el oficialismo logre los dos tercios de la Asamblea que le hubiera permitido legislar sin cortapisas, aunque según el modelo electoral vigente con 98 escaños el presidente Chávez puede gobernar por decretos. “Están como siempre, mintiendo, manipulando (…) Ha triunfado la revolución bolivariana, el pueblo”, aseguró el jefe de Estado.
“Les ganamos por voto nacional, por diputados y por calidad de diputados”, insistió Chávez aunque faltaba que el CNE diera los datos oficiales sobre los votos nacionales y los resultados totales de escaños.
Quedarían en el aire unos 520.000 votos, pertenecientes en su mayoría al partido de izquierda Patria Para Todos (PPT), que según el mandatario no pueden ser contabilizados como sufragios de la oposición.
Sin embargo, los adversarios políticos del mandatario consideran que los votos del PPT sí deben incluirse dentro de los sufragios no chavistas, lo cual les daría la mayoría de votos.
Chávez, que llegó al poder en 1998, solo perdió hasta el momento un referendo sobre una reforma constitucional de un total de 14 comicios que organizó su gobierno.
Ayer, el presidente Chávez retó a la oposición a que convoque a un referendo para revocar su mandato. “Ya yo cumplí tres años, tiempo más que suficiente para que revoquen mi mandato. Convoquen ya un (referendo) revocatorio”, lanzó Chávez en el palacio de Miraflores de Caracas. “Son todos unos partiditos, unos micropartidos”, añadió sobre la oposición, tildándola además de “contrarrevolucionaria” y “ultraderecha”.
Como sea, Chávez no alcanzó su objetivo de dos tercios de escaños (110), esencial para avanzar en su proyecto político socialista y para llegar fortalecido a las presidenciales de 2012, cuando aspira de nuevo a un tercer mandato de seis años.
A partir del próximo enero, el PSUV tendrá que debatir con la oposición para aprobar leyes orgánicas o para lanzar una Asamblea Nacional Constituyente. Tampoco podrá aprobar sin negociación previa gastos del Ejecutivo ni nombrar a los responsables del resto de poderes públicos, como la Fiscalía o los jueces del Tribunal Supremo.
“No queremos convertir la Asamblea Nacional en un ring de boxeo sino en un lugar donde se debata, donde se discutan las leyes que tiene en mente el país”, pidió ayer Julio Borges, elegido diputado por la Mesa de la Unidad.
Desde 2005, la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral) estaba controlada casi al 100% por el oficialismo, que poseía unos 150 diputados, debido a que la oposición decidió no presentarse a los últimos comicios legislativos.
Reunidos en la Mesa de Unidad Democrática, diversos partidos opositores socialdemócratas, liberales o de izquierda moderada dejaron de lado sus diferencias con el único fin de frenar a Chávez y tendrán ante ellos ahora el reto de mantener viva y fuerte esta coalición.
Reacciones
El gobierno de Estados Unidos felicitó a los venezolanos por las elecciones y confió en que sirvan para “profundizar el diálogo”. También la Organización de Estados Americanos (OEA) saludó los comicios que mostraron, dijo, que “se puede hacer política en paz”.
Ahora queda por delante la tarea de “buscar caminos comunes” entre las partes para el bien del país, añadió en un comunicado. En Cuba, el ex presidente Fidel Castro que “el enemigo” (la oposición) haya ganado escaños en el parlamento, mientras que su vecino colombiano, el presidente Juan Manuel Santos aceptó “gustoso” la invitación hecha por Hugo Chávez el domingo para viajar a Caracas en octubre y “encontrarnos en suelo venezolano”.
Santos también celebró que los comicios hayan transcurrido “con paz y entusiasmo”.
