Los propietarios de Televisa y Televisión Azteca, Emilio Azcárraga y Ricardo Salinas, se unen para operar Iusacell, que presidirán de manera conjunta para competirle a Telcel.
Las dos televisoras llegaron a un acuerdo por el cual Televisa adquirirá 50% de las acciones de la firma de telefonía móvil, por mil 565 millones de dólares en deuda convertible. y 37.5 millones de dólares en capital.
Con esta operación, Televisa se convertirá en un operador múltiple play, al ofrecer en un paquete servicios de internet fijo y móvil, telefonía fija y celular y televisión de paga.
“La participación de Televisa en el mercado de tv y datos móviles es crucial para llevar a cabo sus esfuerzos de expansión en la industria de las telecomunicaciones. La inversión fortalecerá la estructura de capital de Iusacell, financiará inversiones de capital futuras y lanzará nuevos servicios”, dijo la televisora.
Sin embargo, el mercado financiero no aprobó el anuncio y castigó la acción de Televisa, que cayó ayer 4.5% (10% desde el 4 de abril).
Luis Niño de Rivera, vocero de Iusacell, dijo que “esta operación es para hacerle frente a una competencia totalmente desigual por parte de Telcel, por lo que se ofrecerán precios mas bajos y mayor calidad”.
Eduardo Pérez Motta, presidente de la Comisión Federal de Competencia (CFC), dijo ya fue notificado sobre la concentración y que la resolución se emitirá en los siguientes 35 días hábiles. Añadió que para decidir si autoriza o no esta operación, el Pleno de la CFC deberá definir el mercado relevante e impacto de la concentración, a fin de que no ponga en riesgo la competencia en este segmento y en mercados relacionados donde haya efectos secundarios.
El presidente de Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), Mony de Swaan, dijo que su posible preocupación sobre la alianza tiene que ver con la concentración en contenidos, pues Televisa y TV Azteca son las principales proveedoras de éstos en el país, pero esperará al fallo del Pleno de la CFC.
Ramiro Tovar, especialista en telecomunicaciones, advirtió que la unión de estas empresas implica “un riesgo anticompetitivo mayúsculo”, debido a que Televisa es un agente económico que opera en distintas plataformas: tv abierta con 75% del mercado, de paga con 50% de usuarios en este servicio, y tiene presencia en redes coaxiales a través de las cuales ofrece internet, a las cuales se integraría ahora la red inalámbrica.
Dijo que si bien es cierto que de manera aislada no habría problema en que la CFC autorice esta operación, debido a que podría argumentar que Televisa no participa en el mercado de la telefonía móvil, y en estricto sentido de la ley no habría obstáculos, la CFC debe tomar en cuenta el contexto en el que operan ambas compañías.
El Universal