Las próximas generaciones realizarán el juicio sobre la lucha contra el crimen organizado que lleva a cabo el gobierno federal, pero se tiene la conciencia de haber “obrado como patriota”, en busca del bien de México, aseguró el presidente Felipe Calderón.
“Independientemente del juicio que merezca para este tiempo, las generaciones venideras, por lo que a mí respecta y, estoy seguro, por lo que toca a cada una y a cada uno de ustedes”, serán las que realicen esa tarea, añadió el Presidente.
“Lo que hay también es una conciencia absolutamente cierta de haber obrado en busca del bien, en busca del bien de los demás y en busca del bien de México que, a final de cuentas, esa es, precisamente, la única acción posible en la conciencia de cualquiera patriota: actuar pensando en el bien de México.”
En un desayuno de fin de año con integrantes de la Secretaría de Marina, el mandatario señaló que el personal de las fuerzas armadas son mujeres y hombres “heroicos”, porque no han dudado un momento en estar en la línea de fuego para defender a los inocentes.
“Sea por mar, por tierra o por aire, han estado ahí, con disciplina y lealtad a México para salvaguardar la patria y proteger a los mexicanos.”
Aseguró que si bien ha habido “aciertos y errores” en la estrategia contra las organizaciones criminales, dejará una casa mucho más limpia para ser habitada por los mexicanos.
“Veo con satisfacción que lo que hemos hecho, con aciertos y con errores, dejará después de nosotros una casa mucho más limpia, una casa mucho más segura, una casa que será digna de ser habitada por los mexicanos. Eso será un esfuerzo que, desde luego, no podría hacerse sin ustedes y sin las fuerzas armadas”, expuso.
Acompañado por los secretarios de Marina, almirante Mariano Francisco Saynez, y de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván Galván, además de la procuradora general de la República, Marisela Morales, Calderón aseguró que la lucha contra el crimen organizado se actuó a tiempo y vio con satisfacción lo realizado en materia de seguridad pública en su administración.
“Puedo asegurarles que actuamos a tiempo, como quien entra a una casa desconocida, una casa nueva y alcanza a ver ahí cucarachas corriendo por un rincón y metiéndose a un agujero en la pared, y al levantar el tapiz o la duela, lo que se encuentra es que está infestado de esos animales, de esas plagas.
“Lo que queda no es volver a tapar ese agujero, no es volver a pegar el tapiz o poner nuevamente la duela. Lo que hay que hacer es limpiar, reconstruir, sanear, poner nuevamente la casa en orden”, mencionó el mandatario.
“No podíamos callar”
En el Restaurante Naval reiteró que le tocó la responsabilidad de luchar contra el crimen organizado justo en el momento de la expansión territorial de los grupos delincuenciales, que amenazan a las instituciones democráticas y el estado de derecho.
“Ante una situación así, ningún gobierno responsable podía quedarse impasible, ignorar esa realidad y pretender decir que no pasaba nada, pretender que la tormenta no existiera o que simplemente ya estábamos en un puerto en el que no, definitivamente, no estábamos (…) No íbamos, y no lo haremos nunca, a abandonar a las familias mexicanas a su suerte”, afirmó.
Luego de reconocer la labor de 12 elementos en distintas áreas de la Armada de México, Calderón destacó el trabajo de esta institución por la detención de delincuentes como Raúl Lucio Hernández Lechuga, El Lucky, líder de Los Zetas en Veracruz, Oaxaca y Puebla, detenido esta misma semana por la Marina
Asimismo, recordó la detención o abatimiento de Ezequiel Cárdenas Guillén, Tony Tormenta; Arturo Beltrán Leyva, El Barbas, Sergio Villarreal Barragán, El Grande, o Ricardo Almanza Morales, El Gori.
Rezará por la paz en la Basílica
El presidente Felipe Calderón asistirá por primera vez a una ceremonia religiosa pública. El próximo desde participará en la Misa por la Paz que se realizará en la Basílica de Guadalupe.
La ceremonia será presidida por el cardenal Norberto Rivera Carrera y se prevé asista el arzobispo Carlos Aguiar, presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), así como otros representantes de la Arquidiócesis de México.
Con esta misa en la Basílica se inicia la denominada Jornada de Oración por la Paz, que fue promovida por un grupo ecuménico; durante tres días se pedirá por la paz en México.
Uno de los organizadores es el obispo auxiliar Carlos Briseño, representante de la Zona Metropolitana del DF ante la CEM, quien a través de circulares invitó a los grupos laicos de la capital del país a asistir este domingo al templo mariano.
El presidente Felipe Calderón ha reconocido en varias ocasiones que es católico, pero hasta ahora no había participado en ceremonias religiosas públicas. Su principal participación junto a jerarcas católicos se dio en noviembre pasado durante la inauguración de la Plaza Mariana, así como en una reunión privada con 100 obispos en Los Pinos.
Organizadores de la ceremonia señalaron que la asistencia del jefe del Ejecutivo a la Basílica es para reiterar que es católico y no pertenece a la iglesia evangélica Casa sobre la Roca, con la que se le ha vinculado desde su campaña presidencial.
Notimex