La Policía Federal presentó este miércoles a Carlos Montemayor González, “El Charro”, suegro de Edgar Valdéz Villarreal “La Barbie”, señalado por la corporación como el sucesor del narcotraficante tras su detención el pasado 30 de agosto.
El grupo delictivo de “La Barbie”, identificado como el cártel independiente de Acapulco, fue el responsable del asesinato de 20 turistas michoacanos el pasado 20 de septiembre, al confundirlos con integrantes de “La Familia Michoacana” que llegaban a ocupar la plaza.
Montemayor González , quien tras la detención de “La Barbie” asumió el liderazgo de su organización delictiva, fue detenido el martes en Santa Fe junto con David Garza González “El Hierbas” y Alex González Martínez, “El Mongol”, explicó en conferencia de prensa Eduardo Ramón Pequeño García, jefe de la División Antidrogas de la PF.
El detenido, presuntamente, reconoció ante la Policía Federal que el asesinato de los michoacanos fue un error, al confundirlos con integrantes de “La Familia Michoacana” por los miembros del grupo delictivo de “La Barbie”, autodenominado Cártel Independiente de Acapulco que rompió con él tras su captura.
Pequeño García explicó que Montemayor González se vinculó al cartel de los Beltrán Leyva en 2003, cuando Sergio Enrique Villarreal Barragán, “El Grande”, lo invitó a participar.
La esposa del detenido era prima de Ana Laura Támez, esposa de “El Grande”, asesinada en 2003 por “Los Zetas”.
También en la misma época conoció a “la Barbie” en un Palenque de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Con “El Grande”, Montemayor González comenzó a traficar cocaína en Estados Unidos, a donde enviaba dos cargamentos semanales de 15 a 30 kilogramos, durante dos años, para un total aproximado de una tonelada del narcótico.
En 2005, una de sus hijas se casó en Acapulco, Guerrero, con “La Barbie” y por ello comenzó a recibir amenazas de “Los Zetas”, quienes mataron presuntamente a varios de sus colaboradores, por lo que se fue a vivir a Huixquilucan, estado de México.
Ahí, bajo el nombre de Alejandro García Treviño se hizo pasar por empresario dedicado a la organización de eventos charros.
Según Pequeño García, tras la captura de “La Barbie” se hizo cargo de la organización delictiva, pero comenzó a tener problemas con los mandos medios y finalmente la célula de Acapulco rompió con él.
Su detención fue resultado de las investigaciones iniciadas tras la detención de “La Barbie”, el 30 de agosto pasado, y de intercambio de información con la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos.
El Universal