La crisis económica del país y la global a partir de la desaceleración en los Estados Unidos, así como la que aqueja a los países de Europa, han provocado que los turistas reduzcan sus días de vacaciones. Oaxaca, cuya principal actividad económica es la turística, no ha quedado exenta de este fenómeno.
El presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Oaxaca (AMHM), Juan Carlos Rivera Castellanos, asegura que cada vez son menos los días de ocupación hotelera en la capital del estado.
“Antes contábamos con varios días a lo largo del año, especialmente los puentes o fines de semana largos, las Semana Santa, la Guelaguetza, la temporada de muertos y la temporada vacacional de diciembre. Antes por ejemplo, contábamos con los dos meses de vacaciones de verano. Ahora son sólo unos días, solamente los días de Guelaguetza, los fines de Semana de Guelaguetza que llegamos a una ocupación alta; pero el tema es que cada día son menos los días que tenemos para llenar Oaxaca de turismo”.
Esta reducción de los periodos de vacaciones de los turistas en el estado, los atribuye a factores exógenos que no tienen nada que ver con lo que pasa en la entidad. En este sentido, explica que la situación económica en el país no ha estado bien, se hace hincapié en el turismo nacional; mientras que la desaceleración económica del vecino país del norte y la crisis de las naciones europeas también se ve reflejada en la reducción del turismo internacional.
A pesar de eso, dice, la entidad oaxaqueña sigue registrando ocupaciones altas aunque son las menores por los cada vez menos días en los que hay repuntes en la ocupación de habitaciones de hotel por vacacionistas.
“Me parece que Oaxaca está dando una señal, la cual es que es un destino 100 por ciento seguro para el turismo, es por eso que seguimos teniendo cuantiosas cantidades de turismo nacional y me parece que esa es la razón por la cual los días son cada vez menos”.
De acuerdo con la AMHM, durante la temporada vacacional de Semana Santa el promedio de ocupación hotelera fue de 55 por ciento en las dos semanas. En la primera semana, alcanzó un aproximado de 63% que según la asociación empresarial cumple con la expectativa que se había trazado; mientras que en la segunda semana se redujo hasta en un 44 por ciento.
El líder hotelero sostiene que las expectativas de la primera semana se pudieron haber superado, sin embargo las manifestaciones no permitieron que el turismo lograra apuntalar a la economía oaxaqueña durante los primeros tres días de vacaciones de la Semana Santa.
“Antes por ejemplo, contábamos con los dos meses de vacaciones de verano. Ahora son sólo unos días, solamente los días de Guelaguetza, los fines de semana de Guelaguetza que llegamos a una ocupación alta”, ilustró Juan Carlos Rivera Castellanos, presidente AMHM-Oaxaca.
“Lunes, martes y miércoles fueron días de bastante preocupación para los hoteleros debido a que los turistas se iban impactados de cómo se estaban presentando las cosas en esos momentos y después, el jueves, finalmente, los mentores de Oaxaca decidieron retirarse, irse de vacaciones y entonces fue el momento en que se pudo recuperar la ocupación hotelera y alcanzamos picos de alrededor del 90 o 95% de ocupación.
“Los datos que obtuvimos en la Semana Santa si bien no son los mejores que hubiésemos querido debido a las diversas manifestaciones de los grupos político-sociales, me parece que de una forma si siente el impacto económico en la hotelería organizada”.
Pero la inestabilidad social no es la única causa que impide o afecta el desarrollo de la actividad turística y de los prestadores de servicio, como los hoteleros, admite.
Oaxaca, precisa, necesita infraestructura para su desarrollo turístico y esta infraestructura, dice, depende de la construcción de un Centro de Convenciones y un Recinto Ferial. Con estas dos obras aumentaría la afluencia turística en la entidad y la ocupación hotelera, porque implicaría la desestacionalización de los datos estadísticos que se presentan a lo largo del año en este rubro.
“Esto quiere decir que podríamos tener ocupación en temporadas bajas, en las que ahora se llaman temporadas bajas. Y que si tuviéramos el Centro de Convenciones el convencionista vendría a Oaxaca y se quita en automático ese pico bajo que se presenta actualmente debido a que no tenemos este centro de convenciones. Pero un centro de convenciones de verdad, digno de Oaxaca, que tenga las instalaciones, los requerimientos, que cumpla con las especificaciones de un centro que esté a la altura de poder traer a grandes convenciones, a grandes grupos que movilicen la economía de esta industria y que genera empleos directos e indirectos”.
Independientemente de los factores exógenos y la falta de infraestructura que han mermado la industria turística en el estado, el Presidente en Oaxaca de la AMHM afirma que una de las principales preocupaciones de los hoteleros en el corto plazo es la respuesta que dé la Sección 22 del SNTE a la solución a sus las demandas contenidas en el pliego petitorio por parte del gobierno que encabeza Gabino Cué Monteagudo.
Según el empresario Rivera Castellanos, el gobierno del estado está cumpliendo con las demandas del magisterio oaxaqueño para evitar que se movilicen e instalen su tradicional plantón en el Centro Histórico; aunque, apuntó que la administración estatal no puede resolver todas las exigencias del gremio de profesores.
“Estamos en espera de cómo el magisterio va a reaccionar ante la propuesta que ya hizo el gobernador Gabino Cué. Haría un llamado a que se actuara de forma responsable a que no nos sigan lastimando a los comercios establecidos, que no nos sigan lastimando a los que estamos en el sector del turismo. Ya que el principal motor de la economía oaxaqueña es la industria sin chimenea, es la hotelería, es el turismo. En esa medida les pedimos que nos dejen trabajar, que dejen a un lado todas estas cuestiones que no aportan al beneficio del sector productivo de Oaxaca”.
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