Grupo Bimbo mantiene un intenso litigio contra el Servicio de Administración Tributaria para librar a sus panes dulces y galletas del pago de 8 por ciento a los alimentos altamente calóricos.
En los próximos días, el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa tendrá que resolver si los productos de Bimbo están o no sujetos al llamado impuesto a la chatarra, incluido desde 2014 en la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios.
Fuentes hacendarias informaron que, Bimbo se ha cuidado de aplicar en sus ventas el cobro de este impuesto, que pagan los consumidores, por lo que no está en riesgo de incurrir en una deuda con el SAT si se resuelve que sí está obligada por la Ley.
Cuando revisó el caso por primera vez, el 14 de enero de 2015, la Sala Superior del TFJFA omitió aclarar si los productos de Bimbo, y los de su filial de pastelerías El Globo, están o no sujetos al IEPS, que grava “alimentos no básicos que aportan más de 275 kilocalorías por cada 100 gramos”.
La confusión existe porque, la Ley del IEPS no menciona expresamente al pan dulce y las galletas como gravados, mientras que el SAT, en una resolución miscelánea fiscal, exentó solo al pan no dulce.
Según Bimbo, que el año pasado tuvo ventas de 187 mil millones de pesos, sus productos son alimentos básicos para los mexicanos, por lo que deberían estar exentos de este impuesto, que busca desincentivar el consumo excesivo de calorías.
El pasado 24 de agosto, el Quinto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa amparó a la empresa, y le dio 20 días hábiles al TFJFA, para que dicte una nueva sentencia.
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