Luego de asegurar que el tan anunciado “cambio” no ha llegado a Oaxaca y sólo quedó en la demagogia, la diputada local de la fracción del PRI, Delfina Prieto Desgarennes, lamentó que los feminicidios siga siendo un grave problema en Oaxaca, pues en los dos últimos años de la administración estatal, se incrementaron en un 50 por ciento.
Pero lo más lamentable, afirmó, que ante la impunidad y negligencia oficial, los culpables de este delito se queden sin castigo y los responsables de aplicar la justicia, no hacen nada por ofrecer seguridad a la sociedad y a las familias oaxaqueñas.
“Es preocupante la actitud de este gobierno, porque los responsables de aplicar la ley no están dando resultados, a pesar de que, desde el 8 de agosto del año pasado, el Congreso aprobó las reformas al Código de Procedimientos Penales, con un castigo ejemplar de 40 a 60 años de prisión a quienes cometen este delito.
“La mencionada reforma no sirve sin un sistema eficiente de Prevención del Delito y un sistema real de Procuración y Administración de justicia”.
Recordó que según datos de organizaciones civiles, en dos años, de diciembre de 2010 a noviembre de 2012, fueron victimadas 173 mujeres, mientras que en los dos últimos años de la pasada administración estatal, 115 mujeres fueron asesinadas, lo cual significa un incremento real del 50 por ciento.
Detalló que este incremento se debe precisamente a la impunidad generada por la indiferencia y negligencia gubernamental para actuar en la prevención, atención, sanción y erradicación de la violencia feminicida, la cual, es un reflejo de la violencia intrafamiliar.
La mayor incidencia de este delito, lo sufren las amas de casa en los rangos de 21 a 40 años de edad, principalmente en los Valles Centrales, la Costa y la Mixteca, quienes son asesinadas por su pareja o ex pareja sentimental, donde se percibe abuso extremo de la fuerza y crueldad excesiva.
Se refirió también a otros datos que tiene que ver con este delito, como los 458 casos de violencia intrafamiliar reportados por los medios de comunicación, además de los dos mil 910 de los que tiene conocimiento la Procuraduría estatal.
A estas cifras se suman 355 ataques sexuales, destacando la violación, así como 21 embarazos derivados de este delito, cuyas víctimas no han tenido acceso a la interrupción del embarazo porque no se ha podido demostrar la relación víctima-agresor.
Por todo ello, hizo un exhorto al titular del Ejecutivo estatal para que se involucre en este delicado asunto que duele a la sociedad y obligue a los responsables de la justicia a que cumplan con los compromisos que hace dos años ofrecieron a los oaxaqueños.