Las autoridades chinas confirmaron hoy la muerte de una persona a causa de la nueva cepa H7N9 de gripe aviar en Shanghái, lo que eleva a diez el número total de fallecidos, a la vez que anunciaron dos nuevos contagiados en la misma metrópolis.
Según la agencia oficial Xinhua, son ya 38 los contagiados, de los cuales diez han muerto y sólo uno, un niño de cuatro años, se ha recuperado de los síntomas que había experimentado de forma leve.
Por regiones, Shanghái sigue copando el mayor número de contagios, seguido por las provincias de Jiangsu, Zhejiang y Anhui, todas ellas situadas en el este de China.
La Comisión Nacional de Sanidad y Planificación Familiar asegura que entre las personas que han estado en contacto directo con los contagiados no se ha detectado ningún síntoma que indique la menor “relación epidémica” entre todos ellos.
En cuanto al menor que se ha recuperado, se trata del primer caso de cura que se conoce para esta variedad vírica que, hasta hace un par de semanas, se desconocía que pudiera afectar al ser humano.
Agencias