MÉXICO, D.F. Obligación del Estado Mexicano atender con prontitud las protestas magisteriales y darle pronta solución para evitar daños a la educación de los niños, que este lunes no pudieron iniciar el ciclo escolar, asentó el senador del PRD Benjamín Robles Montoya, luego que maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación iniciaran un paro de labores indefinido en protesta por la reforma educativa.
Respecto al llamado que hiciera la Secretaría de Gobernación a un debate de altura a quienes se manifiesten por la reforma educativa y energética, Robles Montoya pidió mayor responsabilidad al Ejecutivo Federal para atender los grandes temas nacionales y tener la capacidad para escuchar a la sociedad antes de tratar de imponer reformas contrarias al interés público.
“Que bueno que el secretario de gobernación pida debate de altura, porque es lo mismo que hemos estado exigiendo al Gobierno Federal desde hace tiempo, que escuche a la sociedad, a los partidos políticos, a los legisladores; que juntos construyamos las mejores propuestas y reformas estructurales que requiere el país; si Peña Nieto quiere evitar manifestaciones como las que hoy hace el magisterio por la reforma educativa tiene que consensar y lograr acuerdos, sin modificar el artículo 27 y 28 de nuestra Constitución, para alcanzar la reforma energética pero patriota”, adelantó el congresista federal.
Dijo que las movilizaciones que realiza hoy la CNTE en la Ciudad de México tiene que ser una lección política para el PRI-Gobierno que no es con mayoriteo en la Cámara de Diputados y Senadores ni con ostentosas campañas en medios de comunicación como va a lograr los cambios estructurales que requiere la Nación, sino con un ejercicio de democracia participativa, en donde se escuche y atienda el sentir de la mayoría de la población.
En ese sentido, reiteró que si Peña Nieto y su partido el PRI ya cometieron el error de imponer una reforma educativa contraria al interés de un sector de los trabajadores de la educación, ahora tiene la obligación de atender con prontitud, habilidad e inteligencia la protesta magisterial y para llegar a una solución lo más pronto posible a este grave problema social, que mantiene sin clases a millones de estudiantes de educación básica; y no sólo con llamados imprudentes.