Oaxaca es laboratorio político nacional. Lo sigue siendo tras medio siglo, desde la década de los 70. La traición del gobierno federal lopezportillista trajo consigo la Noche Negra que no termina de dar paso al alba del nuevo amanecer.
Por desmedida ambición de poder y dinero, sin llenadera, participaron en la traición los cercanos colaboradores del más íntegro gobernador oaxaqueño, honesto intelectual y materialmente, don Manuel Zárate Aquino.
A la traición se sumaron los caudillos de las cámaras y organismos empresariales, quienes a cambio del perdón de sus delitos de evasión fiscal, mintieron al Secretario de Gobernación, Jesús Reyes Heroles, que odiaba a don Manuel, porque le exigió respeto a la soberanía del Estado.
En realidad, el paro general de la iniciativa privada, mercados y transportistas, decretado en Oaxaca, era en apoyo al gobernador Zárate Aquino, que respetaba y hacía respetar el Estado de Derecho y las leyes que de esta emanan a los subversivos de la COCEO y la COCEI, no para exigir su salida.
La caída del mixteco, él sí ejemplo de dignidad republicana, no como el indio ladino Heladio Ramírez López, provocó el hundimiento de la Nueva Antequera, la Gran Señora del Sur, en el fango de la ingobernabilidad.
Al igual que México todo, ahora mismo Oaxaca es arena de la disputa por el rumbo de la nación entre populismo socialista y neoliberalismo capitalista. Uno y otro representan la pudrición del pantano de la corrupción.
La tercera derrota consecutiva de Manuel Andrés López Obrador es inminente en 48 horas más. El Mesías Tropical, sus cofrades y feligreses están verdaderamente angustiados y desesperados.
Tienen razón. Las encuestas a su favor les mintieron rotundamente a lo largo y ancho del país, de costa a costa y de frontera a frontera. Si algo sabe hacer Enrique Peña Nieto es ganar elecciones.
Más que las dos anteriores campañas presidenciales del candidato presidencial vitalicio de la izquierda radical, particularmente la que acaba de concluir, se caracteriza por el odio, la violencia y la sed de venganza.
La consultora Etellekt actualizó las cifras de violencia e informó que desde el inicio del proceso electoral el pasado 8 de septiembre se han registrado 544 agresiones contra políticos en todo el país.
De este total, 131 fueron asesinatos. Oaxaca, Michoacán y Puebla se disputaban el segundo lugar con 5 asesinatos, después del vecino estado de Guerrero, pero ahora con la muerte del morenista Emigdio López Avendaño, Oaxaca suma 6 candidatos asesinados.
MALO cumple su amenaza al “soltar al tigre” en Oaxaca con los activistas de Santo Domingo Teojomulco y, si hay fraude, Yeidckol Polevnsky Gurwitz amenaza con “hacer aparecer al diablo”. Ambos odian a Enrique Peña Nieto porque les derrotó en la presidencia y en la gobernación del Estado de México.
Y vaya que “se apareció el diablo” a los habitantes de la capital oaxaqueña. Con acciones típicas de logística paramilitar los milicianos de Teojomulco destruyeron, primeramente, las videocámaras de vigilancia.
Armados aparentemente solo de machetes, palos y resorteras, en realidad, algunos portaban algo más en sus morrales; secuestraron a cientos de trabajadores de las delegaciones federales de CDI, Sedesol y SCT.
Lo peor de todo. La Policía Federal no intervino para rescatarlos, a pesar que es de su competencia proteger los inmuebles y a los trabajadores federales, entre los que había mujeres embarazadas y madres solteras con hijos pequeños abandonados.
Menos intervinieron las corporaciones policiacas municipales de Santa Lucía y de la capital oaxaqueña, ni la Policía Estatal, pese a que robaron un fusil R-15 a uno de los elementos de estas corporaciones.
Una vez más, los demonios de la política están sueltos, y pareciera que han triunfado. Son alimentados por el resentimiento, el odio y la insaciable sed de venganza de los lopezobradoristas desde Morena.
A la ejecución del candidato de la coalición Morena-PT-PES a diputado local por el distrito XXI Ejutla de Crespo, Emigdio López Avendaño, y cuatro personas más en San Vicente Coatlán, se sumó el atentado al dirigente perredista Raymundo Carmona Laredo.
En ambos ataques la Fiscalía General del Estado y la Procuraduría General de la República (PGR), no deben descartar el posible escenario de una “purga” interna al interior de las filas del Movimiento de Regeneración Nacional y del PRD.
No hay que olvidar que el ex perredista y candidato del Movimiento de Regeneración Nacional, Emigdio López Avendaño, fue ex Subsecretario de Desarrollo Agropecuario, Forestal, Pesca y Alimentación (SEDAFPA), durante el gobierno de Gabino Cué, con Salomón Jara Cruz como titular, acusado de saquear 1200 millones de pesos en esa dependencia.
Guardadas las debidas proporciones, si al ex Subdirector de Administración y Finanzas de la Secretaría de Salud y de los Servicios de Salud de Oaxaca, Rafael Pérez Gavilán Escalante, lo ejecutaron para que no denunciara de manera documentada el saqueo, no es descartable que lo mismo ocurriera con Emigdio ante el saqueo de Salomón Jara en SEDAFPA.
El mismo posible escenario de una “purga” interna al interior de las filas del Partido de la Revolución Democrática pudo darse en el caso del controvertido Raymundo Carmona Laredo, quien por tercera ocasión busca ser presidente municipal de Pochutla, y quien arribó a la dirigencia del PRD en medio de la pugna con otras tribus, particularmente con José Julio Antonio Aquino.
Indispensable es aludir a este contexto para explicar y entender el escenario de creciente inseguridad y brutal violencia política que se enfrenta en el actual proceso electoral concurrente, federal, estatal y municipal.
Al igual que López Obrador, Citlalli del Carmen Ibáñez Camacho, nombre real de Yeidckol Polevnsky Gurwitz, quien amenaza con “hacer aparecer al diablo” en México; es una consumada y contumaz mitómana, a pesar de estar adscrita a la religión judía, que prohíbe mentir.
Su padre es el coronel retirado Cuitláhuac Ibáñez Treviño, ayudante militar del presidente Adolfo López Mateos y quien se dedicó a desarrollar proyectos agropecuarios, en comunidades indígenas.
Un invento suyo fue patentado en México e Israel, en el que estuvo en dos ocasiones. En el gobierno de Heladio Ramírez dirigió el proyecto de cultivo de vid de mesa y vino en la Mixteca.
Citlalli del Carmen Ibáñez Camacho, alias Yeidckol Polevnsky Gurwitz es una izquierdista infiltrada en las cámaras y organismos empresariales. Fue la primera presidenta de Canacintra en 2002.
Su hija, registrada con los apellidos del segundo esposo de su madre y de ésta, Shirley Almaguer Camacho, era directora de relaciones públicas de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).
Posteriormente, Shirley, la hija de Yeidckol/Citlalli, fue Vicepresidenta de la Comisión de Enlace con la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), además de ejecutiva de la empresa tabacalera British American Tobacco México, lo que originó conflicto de intereses Yeidckol como senadora por la Ley Antitabaco.
Madre e hija, izquierdistas burgueses capitalistas. Pegan con la izquierda y cobran con la derecha< en los organismos cúpula de la “mafia del poder” empresarial. En otras palabras, la total contradicción.
ha ocupado cargos directivos en Nacional Financiera (Nafin); Banco de Comercio Exterior (Bancomext); Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y Consejo para el Diálogo de los Sectores Productivos.
Actualmente Yeidckol, cuyo nombre tiene significado hebreo y quiere decir “el llamado de Dios”, es Presidenta y Secretaria General del partido político Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
En 2006 fue candidata al Senado de la República del PRD por el Estado de México, resultó electa con un millón doscientos mil votos. Posteriormente, fue Vicepresidenta del Senado de la República 2006-2009.
En 2005 se presentó como candidata del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al gobierno del Estado de México. Fue vencida por el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto, sin embargo fue el mayor número de votos que el PRD tuvo en la entidad para entonces.
Posteriormente, se integró al equipo de la campaña del precandidato a la Presidencia de México entonces, Manuel Andrés López Obrador, y fue Coordinadora de Redes Ciudadanas en el Estado de México.
@efektoaguila