19:04 Los cadáveres de dos inspectores ambientales, un policía municipal y un guía local fueron hallados en una zanja en el municipio de Temazcaltepec, en el central estado de México, después de que acudieran al lugar a investigar la supuesta presencia de residuos tóxicos, informó hoy la Procuraduría General de la República.
Los inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, el policía y el guía fueron torturados y sus cuerpos, semienterrados y desnudos, presentaban impactos de arma de fuego, indicó en un comunicado la Procuraduría General de la República.
Los muertos fueron identificados como Bernardo Sánchez Venegas, de 38 años, y Juan Gavia Xingu, de 41 años, ambos inspectores de la Profepa; Valentín Reyes García, de 44 años, policía del municipio de Villa de Allende; e Isidro Luna Alonso, de 38 años, un guía de la comunidad rural del Manzano.
Los funcionarios públicos fueron “alertados por una denuncia ciudadana que informaba de la existencia de residuos tóxicos, en el municipio de Temascaltepec”, explicó la PGR.
Por esta razón, los inspectores ambientales, en compañía del policía municipal y el guía, se trasladaron a la comunidad rural Cerro de Don Luis, una localidad rodeada por un muro, para “verificar los hechos probablemente constitutivos de un delito ambiental”, destacó la dependencia.
La Profepa denunció la desaparición de los inspectores la tarde del viernes y sus cadáveres fueron hallados en la noche en un paraje boscoso.
Agentes de la PGR, de la Agencia Federal de Investigación, de la Policía Federal y de la Agencia de Seguridad Estatal se encuentran en el lugar de los hechos para recabar evidencias para el “pronto esclarecimiento de los hechos”, según fuentes oficiales.
La PGR abrió una investigación por los hechos, y la Procuraduría del estado de México ya realiza las necropsias de los cuerpos.
Medios locales aseguran que los inspectores ambientales encontraron químicos empleados por el narcotráfico para procesar drogas, razón por la que fueron asesinados por integrantes del crimen organizado, extremo que no fue confirmado por las autoridades.
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