Arrestan a mexicana en Italia por matar a esposo y a un ex novio

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La ciudadana mexicana Estibaliz Carranza Goidsargi fue detenida ayer en la ciudad italiana de Udine, acusada de la comisión de dos presuntos homicidios cometidos en Viena, Austria, informó la policía local.

 

Giovanni Belmonte, jefe de prensa de la comisaría de policía de Udine, dijo que en contra de Carranza había una orden de arresto internacional por los presuntos homicidios de su marido y de su ex novio, cometidos en Viena, Austria, donde ella tenía una heladería.

Belmonte precisó que la acusada, nacida en la Ciudad de México el 6 de septiembre de 1978 y que también tiene la nacionalidad española de su madre, reconoció ante la policía que asesinó a sus dos parejas, que se encontraban en paradero desconocido desde hace meses.

Uno de los cuerpos estaba descuartizado e incrustado en dos heladeras y varios recipientes más pequeños llenos de cemento. Del otro cadáver sólo se ha localizado hasta el momento la cabeza.

En ambos casos, los hombres recibieron disparos en la cabeza, según la policía austriaca.

Según Belmonte, se trataba de los cuerpos del marido de Estibaliz, de nacionalidad alemana y desaparecido en 2008, y de su novio, austriaco, de quien no se tenían noticias desde hace algunos meses.

Según la policía de Udine, la joven explicó, al ser interrogada, que actuó motivada por “problemas familiares”, ya que, según dijo, había sufrido malos tratos físicos y psicológicos por parte de las víctimas.

Esas fuentes indicaron que se mostró tranquila durante todo el interrogatorio, aunque mencionaron que sufre claramente algún trastorno psicológico.

Este nuevo capítulo de la historia criminal en Austria se dio a conocer el lunes en el sótano de un edificio del extrarradio de Viena.

Ese día, unos obreros que trabajaban en el saneamiento de una peluquería ubicada junto a la heladería, entraron en el trastero que pertenece a la mexicana para acceder al desagüe del edificio.

El hallazgo de dos rifles de precisión llamó su atención. La curiosidad los llevó a inspeccionar el habitáculo, donde localizaron un bolso de mujer con una pistola y una libreta con anotaciones en español.

Al escarbar en una heladera llena de cemento ubicada en el sótano descubrieron una bolsa de basura.

“La abrimos y entonces salió ese hedor. Y llamamos a la Policía”, relató Erkan Köksal, el propietario de la peluquería ubicada junto al local de la española.

Al día siguiente, Estibaliz aún acudió a su negocio. Uno de los clientes hizo referencia al hallazgo y a que la Policía estaba investigando.

“Nunca la había visto con esa expresión en la cara. Estaba temblorosa. Habitualmente era una persona muy simpática”, recordó Köksal, testigo de la reacción.

“Salió de la heladería. Cruzó el paso de peatones, se fue a la parada de autobús. Telefoneó y se marchó”, relató el peluquero.

La Policía tardó aún un día en emitir una orden europea de búsqueda por “sospecha de asesinato”.

Pero ayer se supo que la española se trasladó en taxi hasta el norte de Italia, donde se alojó primero en un hotel de la localidad de Tolmezzo, y luego en la ciudad de Udine, donde se encontró con un joven que le ofreció alojamiento en su piso.

Ésa fue la misma persona que, tras reconocerla por la foto difundida por los medios, avisó a la policía, que la detuvo.

Los análisis de ADN han confirmado que uno de los cuerpos hallados es un ex novio y se sospecha que los otros restos pertenecen a su marido, con el que abrió la heladería en Viena y con el que tuvo disputas económicas tras la separación.

El Ministerio de Justicia austriaco confirmó que ya se tramita la solicitud de extradición.

Notimex y EFE