Quedará paralizada Nueva Delhi desde este domingo bajo estrictas medidas de seguridad para la inauguración de los más problemáticos Juegos de la Mancomunidad.
Las autoridades locales no escatimaron en la seguridad y unos 100 mil policías y militares vigilarán a los atletas, visitantes e instalaciones de los juegos. Algunos gobiernos emitieron advertencias de viaje alertando sobre la posibilidad de ataques terroristas en India durante la justa.
El gobierno de Delhi utilizó una ley de 1954 para autorizar el cierre forzado de tiendas y mercados durante el día de la ceremonia inaugural y el 14 de octubre durante la clausura.
El diario Mail Today publicó en su portada del sábado “Delhi cerrará en el Día Inaugural de los Juegos de la Mancomunidad”, que coincide con un feriado nacional por el natalicio de Mohandas K. Gandhi.
Los organizadores locales afirmaron que la villa de atletas —que fue ampliamente criticada por sus malas condiciones higiénicas— ya está casi llena de atletas y dirigentes.
Aunque los juegos no cuentan con las principales figuras de los países —como Usain Bolt, Asafa Powell o Caster Semenya— las autoridades dijeron que más de 6.700 atletas y dirigentes de los 71 países participantes ya confirmaron su llegada. Esa cifra supera las cinco mil 766 personas que estuvieron hace cuatro años en Melbourne.
“Más de cinco mil 800 atletas y dirigentes ya llegaron a Delhi. Con más llegadas programadas en los próximos días, Delhi 2010 se convertirá en (los Juegos de la Mancomunidad) más grandes en la historia”, dijo el secretario general del comité organizador, Lalit Bhanot.
Algunos países retrasaron sus llegadas debido a las malas condiciones de la villa. Además, la semana pasada se derrumbó un puente peatonal cerca de la sede principal de los juegos, y dos turistas fueron baleados el Delhi, lo que aumentó la preocupación sobre la seguridad.
El relevo de la batuta continuó el sábado por la capital india, mientras que el presidente del COI, Jacques Rogge, llegaría en cualquier momento. El príncipe Carlos arribó antes para reunirse con el presidente indio, Pratibha Patil.
La federación de los Juegos de la Mancomunidad evitó una posible riña diplomática por la inauguración al decidir que el príncipe Carlos, en representación de la reina Isabel II, y Patil compartirían el honor.
Bhanot dijo que los problemas que acapararon la atención ya fueron arreglados, pero las obras continuaban a paso frenético en las instalaciones.