Una colección de pinturas del artista Fernando Botero, la cual donó al Museo Nacional de Colombia en el año 2004; una obra del maestro Rodolfo Morales que retrata la forma de vida de su natal Ocotlán de Morelos, así como la propuesta de 3 artistas jóvenes oaxaqueños, fue lo que apreciaron las y los integrantes del Taller de Emociones para Personas con Discapacidad al visitar el Museo de los Pintores Oaxaqueños (MUPO).
Esta actividad formó parte de las que realizan en este taller promovido por el DIF Municipal de Oaxaca de Juárez, que tiene como finalidad que las personas con discapacidad puedan conocerse a sí mismas, aprender técnicas y vivir de la pintura.
“Las visitas permiten tener un estímulo visual de salir del mundo, y esta participación en espacios públicos les da la posibilidad de que se alimenten de propuestas prácticas de otros pintores, complementado con la lectura y la música. Es como una interacción entre los mundos”, expresó Yael Mancilla Gwelob, maestra de arte.
Con el Taller de Emociones para Personas con Discapacidad, las y los alumnos han logrado utilizar el lenguaje del arte como un medio para expresar emociones y pensamientos; aclararse, entenderse y conocerse.
Yael Mancilla señaló que la dinámica de trabajo consiste en la enseñanza de técnicas de dibujo y una introducción al mundo del arte, el cual no solo debe entenderse como una representación de la belleza, sino como un lenguaje integral en el que pueden expresar luz, sombra y dolor.
“Gracias al taller las personas han descubierto capacidades, ya que se llevan cuadernos a su casa, trabajan y han mostrado inquietud por dedicarse a la pintura, por ello el siguiente paso es presentarles artistas oaxaqueños reconocidos para que puedan tener un campo laboral”.
Además de la parte artística, las personas reciben atención terapéutica en la que se trabaja la parte emocional, para reconocer lo que les pasa, nombrar sus enojos y temores, lo que se complementa con el arte.
Eulogio Núñez Pérez, participante del taller declaró que la visita le pareció interesante porque no había tenido la posibilidad de visitar un museo, y gracias a las técnicas que ha aprendido en la clase de pintura podrá plasmar sus pensamientos.
“El taller me ha servido como terapia por mi condición en sillas de ruedas, ya que distraigo mi mente y la pintura me ha comenzado a interesar”.
El Taller de Emociones para Personas con Discapacidad se imparte los miércoles y jueves de 10 a 13 horas en el Centro Cultural El Columpio, ubicado al interior del Centro Comercial Reforma.
