17:43 Antes de renunciar, el ahora ex encargado de despacho de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), Albertico Guinto Sierra reactivó algunas órdenes de aprehensión en contra de dirigentes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), uno de ellos fue detenido la noche del domingo 20 de junio, aunque recuperó su libertad a partir de que la causa penal iniciada en su contra ya prescribió.
El dirigente del Movimiento 6 de Marzo (M-6-M), Bertoldo Martínez Cruz pasó la noche en los separos de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) en Chilpancingo, tras ser detenido en un retén instalado en la ciudad de Iguala, a partir de una causa penal que ya prescribió.
Martínez Cruz, quien estuvo preso en el penal federal de “Puente Grande Jalisco” de 1996 a 1999, acusado de mantener supuestos nexos con el Ejército Popular Revolucionario (EPR), fue interceptado cuando viajaba de Iguala hacia Chilpancingo.
Pasó la noche en las antiguas instalaciones de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), en donde los nuevos mandos de la fiscalía guerrerense revisaron y comprobaron que la causa ya prescribió.
En 1994, el dirigente social participó en una movilización social que derivó en la toma del palacio municipal de San Marcos, en donde se recogió una cantidad importante de fertilizante que fue distribuido entre los campesinos del lugar.
Después, tras la masacre de 17 campesinos en el vado de Aguas Blancas, en 1995 y el surgimiento del EPR en 1996, la administración estatal de Rubén Figueroa Alcocer lo acusó de formar parte del EPR, por lo que fue detenido y encarcelado, sin que se comprobara el señalamiento.
Para 1999, Martínez recuperó su libertad y todavía en 2001 fue perseguido por el presunto robo de fertilizante, por lo que compareció ante las instancias correspondientes.
La noche del domingo 20 de junio, Martínez Cruz viajaba de Iguala de la Independencia hacia Chilpancingo, cuando fue detenido en un retén de la Policía Ministerial, siendo enviado hacia los separos que la corporación tiene en la capital del estado.
Ahí pasó la noche, aunque para la mañana, el encargado de despacho de la PGJ, David Augusto Sotelo Rosas reconoció que se había cometido un error, ya que la causa penal ordenada en contra de Bertoldo Martínez Cruz ya prescribió.
Salió de las instalaciones de la PGJ alrededor de las 13:30 horas, iba acompañado por el dirigente estatal del PRD, Misael Medrano Baza y el senador David Jiménez Rumbo, también lo fue a recibir su esposa, la diputada Florentina Rosario.
“Me tocó dormir en los separos, pero no me hicieron nada, yo conozco puras de golpes”, dijo con desenfado el dirigente social, para aclarar que no culpaba al nuevo encargado de la PGI de su detención.
“De quien verdaderamente sospecho, es del procurador que se fue, del señor Albertico Guinto Sierra”, dijo al momento de señalar, que en esa misma causa se está involucrando a Ranferi Hernández Acevedo, líder del Movimiento Social de Izquierda (MSI), y quien recurrió al exilio en Francia en 1996, también al ser acusado de pertenecer al EPR.
El dirigente estatal del PRD, Misael Medrano Baza, comentó que tras dialogar con el nuevo encargado de la PGJ, este les precisó que la detención fue ordenada desde los mandos medios de la institución.
Por esa razón, manifestó que se está planteando la instalación de una mesa de trabajo para poder revisar una lista de dirigentes de diferentes movimientos de izquierda, los cuales pudieran estar siendo víctimas de una persecución policíaca, motivada por causas políticas.
El senador David Jiménez Rumbo sostuvo que al partido amarillo le interesa mantener una buena relación con el encargado de despacho, por lo que habrán de esperar a que la situación se clarifique para saber muy bien que fue lo que pasó.
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