Animales de compañía merecen cuidado y respeto

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Tener animales de compañía (perros, gatos u otros) debe responsabilizar a los dueños para cuidarlos, bañarlos, sacarlos a pasear, además de otorgarles la vacuna contra la rabia, desparasitarlos o llevarlos al veterinario si se enferman, ya que forman parte de la familia y merecen amor.

 

 

Así lo dio a conocer el coordinador de zoonosis de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Octavio Gandarillas Castellanos, quien puntualizó que es importante recoger constantemente sus excretas ya que éstas pueden producir enfermedades en las personas, principalmente en la piel y aparato digestivo.

 

Asimismo pueden generar alergias y problemas respiratorios en órganos como el corazón e hígado, por lo que es fundamental llevar consigo una bolsa de plástico para recoger sus heces, las cuales, en esta época de lluvias y corrientes de aire pueden contaminar los mantos freáticos y el agua potable provocando infecciones intestinales.

 

Expuso que para evitar su sobrepoblación es importante esterilizarlos, así como estar pendientes de ellos y llevarlos con cadena o correa al salir, a fin de evitar que deambulen en las calles sin rumbo e inclusive puedan agredir a otras personas.

 

Dio a conocer que en la entidad existen aproximadamente 750 mil perros y gatos, de los cuales el 90 por ciento son de raza criolla o mestiza, lo mismo que en la población felina.

 

Sostuvo que la rabia es una enfermedad vírica, mortal y puede transmitirse al hombre por medio del virus presente en la saliva del animal, el cual penetra por una herida (mordedura o rasguño) y alcanza el cerebro de la persona o del animal contagiado.

 

“Produce lesiones irreversibles que llevan al coma y posteriormente a la muerte entre los cinco y 20 días, por lo que en caso de ser agredido por los animales de compañía y silvestres como murciélagos, coyotes, zorrillos y mapaches, deberán acudir a su unidad médica más cercana” sentenció.

 

Añadió que la rabia en los caninos y felinos, se debe observar si existen síntomas como; cambios de conducta, excitación y agresividad, dificultad en la deglución, salivación, incoordinación en movimientos y postración.

 

Finalmente, exhortó a los padres de familia para que eduquen a sus hijos a no molestar a estos animalitos ya que al hacerlo o huir de ellos se sienten agredidos y por instinto atacan.