Por lo menos 18 muertos dejó hoy una revuelta que duró más de 30 horas en el complejo penitenciario de Pedrinhas, en la ciudad brasileña de Maranhao, reportó la agencia Brasil.
La fuente indicó que cinco agentes penitenciarios que eran mantenidos como rehenes por los presos amotinados fueron liberados.
Antes de que concluyera la revuelta, se informaba de nueve muertos y la liberación de dos agentes, pero cuando los agentes entraron encontraron seis cuerpos más. Otros tres presos fueron hallados muertos en una unidad localizada en el mismo complejo penitenciario.
La agencia Brasil informó que se dispuso el traslado de cerca de 20 presos a la Cárcel Federal de Campo Grande, en Mato Grosso de Sul.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de MaranhÒo, citada por la agencia, el objetivo es trasladar a los presos más peligrosos para que no causen más conflictos.
A petición del gobierno de MaranhÒo, el Ministerio de Justicia envió a Sao Luís personal de la Fuerza de Seguridad Nacional y negociadores para ayudar a controlar el conflicto.
La revuelta comenzó a las 09:30 hora local, cuando los presos despojaron a un agente de sus armas. Los presos se quejan de estar en malas condiciones, de que no cuentan con abastecimiento de agua, y pidieron la sustitución del director.
En un comunicado, la Secretaria de Seguridad Pública de Maranhao, afirmó que el Complejo de Pedrinhas, ‘ha estado en una permanente tensión entre fracciones de presos’.
