Al reiterar que se encuentra listo para el debate entre los aspirantes a la Presidencia de la República, el candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, dijo que los priistas pueden estar tranquilos, pues no tiene preparada sorpresa alguna contra Enrique Peña Nieto.
En su acostumbrada conferencia matutina, el perredista dijo que acudirá al encuentro para dar a conocer sus propuestas y responder las preguntas que se le formulen.
“Que se tranquilicen, que se serenen —los priistas—, nosotros vamos a hacer propuestas”, apuntó.
Comentó que no necesitaba asistir a los ensayos en el World Trade Center, pues se encuentra preparado, incluso bromeó al respecto mencionando a su hijo menor.
“Ahora a Jesús le da por la lucha libre, y quiere estar luchando conmigo y ahí me entreno.”
Detalló que previo al debate estará con su familia, así como al término de éste.
También afirmó que no habrá cambios de estrategia en su campaña, pues consideró que va en la dirección correcta.
Hizo un llamado a los ciudadanos para que vean el ejercicio organizado por el IFE aunque, insistió en su reclamo de que no todos tendrán acceso a éste, debido a la negativa de Televisa y Tv Azteca de transmitirlo en sus canales estelares.
Añadió que no entiende porque dichas televisoras decidieron esto, pues, aseveró, está garantizado un gran rating.
En su casa de campaña, López Obrador afirmó que la figura de Peña no le impone, porque, mencionó “ya saben ustedes lo que representa”. Remató: “Lo que impone es la publicidad y la campaña mediática”.
Por otra parte, el aspirante opinó sobre la violencia que vive el país y acusó que ésta es el “fruto prohibido” de una política facciosa que interpone intereses de grupo en lugar de un bien general.
Agencias
