La primera vacuna contra el dengue tradicional y hemorrágico se encuentra en su penúltima fase de estudio clínico, que es la tercera, y se prueba su eficacia clínica en más de 60 mil personas de 30 países, entre los que destacan Colombia, México, Perú, Brasil y algunas naciones asiáticas, con lo que se protegerá a 3 millones de personas que son infectadas por el mosquito transmisor Aedes aegypti.
Roberto Debass, de área de vacunas de Sanofi-Aventis, explicó que dentro de cuatro años comenzará a circular en el mundo las primeras dosis contra una enfermedad que no tiene cura ni tratamiento hasta el momento, y que en algunos casos se manifiesta en su forma hemorrágica, que es la más severa, causando fiebre alta, dolor de cabeza y espalda, sangramiento de nariz, náusea y vómitos, erupciones en la piel y diarreas, hasta la muerte.
En esta ocasión la vacuna se prueba en un grupo más amplio de niños, jóvenes y adultos, y es que hasta hace unos meses sólo se probó con éxito en infantes de uno a 11 años de EU, Asia y América Latina. En estas zonas se evaluaron los cuatro serotipos de virus del dengue, y en general se observó una respuesta inmune contra la trasmisión.
En México, la Secretaría de Salud consideró al dengue como un asunto de seguridad nacional que puede generar gastos superiores a los mil millones de pesos, y por ello, se analiza la posibilidad de encontrar algún ordenamiento jurídico para meterse en las casas de las personas que se opongan o que se encuentren cerradas por vacaciones para hacer acciones de limpieza, abatización y fumigación.
“Hemos hecho los cálculos del gasto que esto pueda representar y estamos hablando de que esta enfermedad pudiera representar un gasto de hasta mil millones de pesos (…) esto sin contar las incapacidades médicas que, aparentemente, el año pasado en Jalisco llegaron a ser de hasta 50 mil por tres días de trabajo, que resultan 150 mil en total multiplicado por lo que se tiene que pagar, entonces, los costos van creciendo muchísimo”, dijo el secretario de Salud, José Ángel Córdova.
En México ha habido 102 mil 302 casos sospechosos en 2010, más de 21 mil casos confirmados, de los cuales 4 mil 620 son hemorrágicos, así como 33 muertes. “Se ha logrado disminuir el número de casos de dengue en 2010, en 50% respecto a 2009 y hasta a la fecha en 2011, en 85% menos con respecto a 2010”.
En sólo siete años el dengue creció en el país más de 400 por ciento, al pasar de menos de 10 mil casos en 2000, a un total de 52 mil 369 en 2007, y por ello el comité científico de epidemiólogos de la Secretaría de Salud declaró al dengue como una amenaza a la seguridad nacional.
Esta enfermedad ya se extendió a 28 estados del país, incluyendo centros y zonas turísticas, y lo que resulta alarmante es que el vector transmisor, que es el mosquito, ha mutado y se ha hecho resistente a insecticidas tradicionales.
La Ssa reportó que el DF, Baja California, Chihuahua y Tlaxcala están libres de dengue por su altura e intenso frío, pero eso no significa que nunca vaya a llegar el mosquito.
“Un paciente con dengue clásico no causa mayor gasto a los servicios de salud, se le da algo para bajar fiebre pero no hay un antiviral específico, pero uno con dengue hemorrágico llega a costar hasta 20 mil por una hospitalización de 5 días, cada día oscila entre 3 mil y 4 mil pesos, y sí podrían desbordar los servicios de salud”, de acuerdo a la Ssa.
Milenio
