Los Servicios de Salud de Oaxaca confirmaron dos fallecimientos por COVID-19 en la entidad en las últimas horas.
Con ello suman 8 decesos, 69 casos confirmados (de acuerdo al corte del 20 de abril) en el marco del inició a la Fase 3 en la pandemia por el nuevo coronavirus en Oaxaca.
El secretario de Salud, Donato Casas Escamilla, detalló que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) notificó que un hombre de 53 años de edad, originario de la región Cañada, perdió la vida, al presentar complicaciones médicas, por padecer insuficiencia renal, por lo que fue atendido por el personal médico del Hospital Rural número 39 del IMSS-Bienestar de Huautla de Jiménez.
Asimismo, la otra defunción por COVID-19 se trata de un poblador de San Juan Bautista, Tuxtepec, de sexo masculino con 70 años de edad, y un diagnóstico subyacente de hipertensión arterial, quien no logró vencer la enfermedad a pesar de los esfuerzos médicos del nosocomio general de Tuxtepec.
Ante el avance rápido de la incidencia de casos e índices de mortalidad en Oaxaca, Casas Escamilla explicó que la Fase 3 corresponde al escenario más criticó de la pandemia, donde se pierde el monitoreo de las cadenas de contagio, hay una dispersión veloz de casos y la demanda por los servicios de Salud se eleva.
Por lo cual, pidió a la ciudadanía que solo los servicios esenciales deberán permanecer abiertos. “Para evitar el colapso de los hospitales, es fundamental el papel activo y cooperativo de los oaxaqueños, todos los sectores deben participar. En la lucha contra el COVID-19, el frente de batalla no solo está en los hospitales, sino también en cada hogar donde las personas deben permanecer para evitar contagiarse”.
Insistió que hoy más que nunca se debe extremar estrictamente las acciones de higiene y limpieza, el uso de cubre bocas, “cada vez que uno se lava las manos, que se evita un desplazamiento innecesario, se contribuye a frenar la expansión del virus, puede parecer que se trata de actos pequeños, pero su efecto, es importantísimo”.
Finalmente dijo que si se aplica la estrategia Quédate en casa estrictamente, en lugar de tener una curva epidémica inmensa que desborde el sistema de salud, se tendrá una curva más pequeña que garantice el acceso a la atención médica. El reto es para todos, concluyó.
