El Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (CEDHAPI) denunció al alcalde de Tlaxiaco, Germán Simancas Bautista, por discriminar a mujeres triquis, al oponerse a que sean reubicadas en el paraje Yugite de la Cañada el Curtidor, pese a que es una medidas cautelar dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En el Día Internacional de la Mujer, personal de la presidencia municipal de Tlaxiaco bloqueó el acceso a la Cañada el Curtidor para impedir que desplazadas triquis de Valle del Río San Pedro, perteneciente a San Juan Copala, se instalaran en el predio adquirido por gobierno del estado para reubicarlas.
El presidente del CEDHAPI, Maurilio Santiago Reyes, manifestó que hoy unas 20 mujeres triquis, con sus hijos e hijas, iniciaron su éxodo al predio referido en atención a las medidas cautelares otorgadas por la CIDH.
Sin embargo, alrededor del mediodía al llegar al paraje Yugite e intentar pasar algunas de sus pertenencias, descubrieron que el acceso fue bloqueado por hombres de Cañada el Curtidor y personal del ayuntamiento de Tlaxiaco.
Por esa razón, el CEDHAPI exigió el cumplimiento de las medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para garantizar la vida y la integridad física de las beneficiarias.
Y responsabilizó a las autoridades municipales de la ciudad de Tlaxiaco de cualquier agresión, discriminación y atentado en contra de las indígenas desplazadas.
La ONG recordó que las 20 mujeres han sufrido una violación sistemática a sus derechos humanos desde 2012, razón por la que abandonaron sus tierras y, ante el temor de ser asesinadas, tuvieron que salir en éxodo a la ciudad de Tlaxiaco.
Desde el 3 de agosto instalaron su campamento en el anexo del hotel Plaza, localizado en calle Independencia esquina José Domingo Vásquez, lugar donde permanecieron durante seis meses en una situación infrahumana y ahora que iban a ser reubicadas les fue impedido el paso.
Pedro Matías/Proceso