Este sábado la Secretaría de Gobernación del gobierno federal emitió una Declaratoria de Desastre Natural para algunos municipios comprendidos en la porción suroeste del estado de Oaxaca, entre ellos 27 municipios del estado de Oaxaca, principalmente de la costa, luego del sismo de 7.4 ocurrido el pasado martes.
Se trata de: Mártires de Tacubaya, Pinotepa de Don Luis, San Agustín Chayuco, San Andrés Huaxpaltepec, San Antonio Tepetlapa, San José Estancia Grande, San Juan Bautista Lo de Soto, San Juan Cacahuatepec, San Juan Colorado, San Lorenzo, San Miguel Tlacamama, San Pedro Atoyac, San Pedro Jicayán, Santiago lxtayutla, Santa Catarina Mechoacán, Santiago Tapextla, Santiago Llano Grande.
Además de; Santiago Tetepec, Santa María Cortijo, Santiago Pinotepa Nacional, San Sebastián Ixcapa, Santiago Jamiltepec, Santo Domingo Armenta, Santa María Huazolotitlán, San Pedro Amuzgos, Santa María Ipalapa, y Santa María Zacatepec.
En dicha declaratoria, busca atender las consecuencias derivadas del sismo de magnitud 7.4 grados en la escala de Richter ocurrido el pasado 20 de marzo, con lo que se activan los recursos del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN), para la atención de los daños sufridos.
De acuerdo con la dependencia la declaratoria de desastre natural tiene por objetivo permitir que dichos municipios accedan a recursos extraordinarios, que en este caso se activan por tratarse de una región con poblaciones pobres y marginadas, con pocos recursos para su propia recuperación.
El instituto de Protección Civil Estatal, indicó que los dos ejes carreteros que confluyen en esa zona se encuentran en las mismas condiciones de operatividad que antes del terremoto, y que los municipios afectados podrán ver restablecidas sus comunicaciones internas y su dinámica cotidiana en el corto plazo.
Además lanzaron un llamado a los operadores turísticos y viajeros que planean arribar al estado de Oaxaca y sus destinos turísticos en los próximos días, que consideren absolutamente adecuado y factible su viaje y que tengan plena confianza de que las instalaciones y los servicios operan con total normalidad.