La Policía española ha rebajado a 78 el número de muertos en el accidente de tren de Santiago de Compostela, en lugar de la cifra de 80 mantenida hasta ahora, y ha informado de que seis de ellos aún no han sido identificados.
El comisario de la Policía Científica, Antonio del Amo, explicó hoy a la prensa los trabajos que se llevan a cabo en la identificación de los cadáveres.
Del Amo precisó que, aunque ayer se informó de 80 fallecidos, por ahora son 78, ya que se trata de una labor compleja en la que se pueden considerar algunos restos humanos como de diferentes personas para finalmente determinarse que pertenecen a una sola.
De esa cifra total, hay seis que todavía están sin identificar y de los 72 reconocidos hay 69 españoles y tres extranjeros.
Por otra parte, el maquinista del tren siniestrado está oficialmente detenido y se le han leído los derechos judiciales que le asisten.
El conductor permanece en un hospital de Santiago de Compostela y ha sido imputado por “imprudencia” con resultado de muerte, dijo el jefe superior de la Policía de la región de Galicia, Jaime Iglesias.
Iglesias indicó en rueda de prensa que el maquinista está “imputado por un hecho delictivo vinculado a la autoría del siniestro” y que la declaración policial se puede producir “en cualquier momento”.
Los investigadores recuperaron las “cajas negras” del tren, que a elevada velocidad descarriló al tomar una curva. Las cajas contienen la velocidad, distancias y los frenados, de forma parecida a las que llevan los aviones.
Agencias
