Alrededor de 13 millones de niñas en América Latina abandonan sus estudios de nivel secundaria, factor que incide en reproducir el ciclo de la pobreza, afirmó hoy el director del organismo Plan Internacional, Roland Angerer.
En el marco del Día Internacional de la Niña, que se celebra este viernes, Angerer señaló que en el mundo 65 millones de menores de 18 años de edad “están fuera de las escuelas y en América Latina 20 por ciento no termina la secundaria”.
“Eso es un problema porque si no tienen educación de calidad están expuestos a más violencia y en riesgo de quedarse en la pobreza. En promedio si una niña termina la secundaria, su ingreso como adulto aumentará entre 10 y 15 por ciento”, agregó.
Según Angerer, nueve años de estudios pueden dar herramientas “para transformar” la vida de una persona e incluso sacarla de la pobreza”.
“La educación de las niñas es un tema de igualdad y de justicia porque en muchos casos ellas se quedan atrás en comparación con sus compañeros masculinos por razones de violencia doméstica o de trabajo doméstico”, afirmó.
Las barreras que impiden a las niñas culminar sus estudios son entre otras la pobreza, el trabajo doméstico, los embarazos tempranos y los roles de género, indicó Angerer.
El director regional de Plan, un organismo que impulsó la creación del Día Internacional de la Niña, mencionó que el fenómeno es más intenso en aquellos países donde existen poblaciones importantes de indígenas o afrodescendientes.
Señaló que los gobiernos deben canalizar recursos para asegurar la permanencia de las niñas en las escuelas.
“Pensamos que es la mejor forma de romper el ciclo de la pobreza”, advirtió Angerer.
Agencias