Paso a paso alcanzamos junto a los nuestros una mejor vida. Mauro Cruz

Print Friendly, PDF & Email

afodepoLuego de realizar un recorrido para verificar el avance en la instalación de las estufas ahorradoras que la Asociación para el Fomento y Desarrollo de los Pueblos de Oaxaca gestionó para San Juan Lachigalla, comunidad ubicada en los Valles centrales de Oaxaca y considerada de alta marginación, Mauro Cruz dirigente de AFODEPO, reconoció que ha sido una labor difícil y extenuante mas no imposible, para poder cubrir las necesidades que tienen los habitantes de las comunidades que durante muchos años han permanecido sobreviviendo con apoyos mínimos, sin embargo la vocación de ayuda que tiene la organización que representa, ha logrado superar las expectativas de atención a los ciudadanos cambiando incluso su forma de vida “nuestra gente esta acostumbrada a vivir en condiciones muy precarias y poniendo en riesgo su salud, lo ven como algo normal porque prácticamente nunca han recibido apoyo. Hacen tortillas para alimentarse pero también para tratar de ganarse la vida, aunque prácticamente se les va por respirar el humo de la leña. Con las estufas que gestionamos se reduce hasta en 95% la probabilidad de que respiren ese humo, lógicamente se reducen las enfermedades respiratorias que durante años han padecido, así de importante es la ayuda que estamos proporcionando”.

Tan solo en esta comunidad se instalarán 418 estufas ahorradoras con una inversión de un millón tres mil pesos, sin embargo serán más de 2 mil destinadas para comunidades como San Jerónimo Coatlán, San Pedro Taviche, San Vicente Coatlán y Asunción Ocotlán.

La señora Priscila Villa una de las beneficiarias, explicó algunos de los beneficios que para ella y su familia han notado a partir de tener una estufa ahorradora “antes mi cocina y toda mi casa se llenaba de humo, ahí estábamos todos llore y llore por tanto humo, nos daba tos a cada rato, a los niños los llevábamos a cada rato al doctor y ahora pues ya no, el humo se sale todo y ya no nos enfermamos, además hacemos más tortillas y ocupamos menos leña”.

Finalmente Mauro Cruz dijo que en comparación con la necesidad que existe en la mayoría de las comunidades del Estado, el apoyo que a través de AFODEPO se le brinda a los ciudadanos es mínimo, “sabemos que es poco pero no descansaremos para tratar de apoyar a toda esa gente que cree en nosotros, es una labor muy grande pero vamos caminando poco a poco”.