No solo en dinero se ahorra: Dante Montaño

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dante-montanoAhora que el buen fin ha terminado, espero hayan seguido los consejos compartidos en el anterior número y hayan resultado ilesos de tentaciones y de compras innecesarias.

Temporadas como el buen fin nos permiten reflexionar sobre la necesidad de hacer compras racionales, no solo por el gasto que implica comprar, sino porque lo productos comprados pueden también ser una forma de ahorro, así es, el ahorro puede ser más que dinero en efectivo.

Una forma de ahorrar es convertir el dinero en objetos, artículos de uso; muebles inmuebles y otras propiedades, así que, guardar el dinero no es la única forma de ahorrar, también se puede hacer mediante la inversión o compra; solo que este sistema tiene sus propias advertencias.

Por ejemplo adquirir casas y terrenos puede ser una buena forma de ahorrar, siempre y cuando se elija una propiedad cuyo valor no corra el riesgo de depreciarse, también que la propiedad no tenga más de 15 años de construida, pues eso implicará costos de mantenimiento que resultarán una mala inversión, claro que habrá sus excepciones; como aquellas propiedades antiguas, de valor histórico o realizadas por algún reconocido arquitecto.

El punto anterior requiere de altas inversiones, pero existen formas de ahorro materiales para todos los bolsillos, como pueden ser las antigüedades que existen en casa de generación en generación, para algunos coleccionadores altamente cotizadas. Si en casa sabemos que existen este tipo de piezas hay que llevarlas con especialistas para que proporcionen un aproximado de su costo real y tenerlo en cuenta en cuanto se quiera convertir en dinero; mientras eso no sucede habrá que cuidarla y mantenerla en las condiciones requeridas.

Si no contamos con obras de arte, existe la posibilidad de conservar piezas que en algún momento fueron útiles, como teléfonos antiguos, postales, dispositivos electrónicos en desuso, números pasados de revistas importantes, tarjetas telefónicas y objetos que por su peso histórico y tecnológico son una posibilidad de valor.

Los vehículos de motor, no son sinónimo de ahorro, al menos que se trate de uno de colección o que haya pertenecido a alguna personalidad. Y, no lo es porque ya sabemos que al salir de la agencia se devalúa, además que es un objeto que continuamente vale menos.

Las joyas pueden considerarse una inversión de mediano riesgo, salvo aquellas adjudicadas a algún diseñador,  es cierto que el valor de una joya no se deprecia, pero al momento de venderlas solo se obtiene su valor mediante el cálculo de los materiales de realización y no se cuenta el trabajo de elaboración lo que muchas veces resta su valor original.

Hay a quienes les funciona tener este tipo de inversiones porque será un recurso que estará ahí, sin riesgo de ser gastado al primer impulso, y también puede recurrirse a bancos o cajas de ahorro, aunque el rendimiento no sea el mismo, ya compartiremos ese tema posteriormente.

Siempre que se quiera ahorrar invirtiendo con alguna de las opciones antes mencionadas, es importante acudir con un especialista, para que sea esa persona quien nos indique valor y cuidados que habrán de recibir las piezas, y sobre todo considerar que es un ahorro que estará ahí, con el mismo fin que si fuera en dinero, para gástalo racionalmente.