“México clama justicia, demanda paz y esperanza”, Mariana Benítez Tiburcio

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marinaEn el marco de la glosa del Tercer Informe del Presidente Enrique Peña Nieto, la diputada federal por Oaxaca fijó la postura del Partido Revolucionario Institucional en materia de Política Interior.

 No podemos rehusar a nuestra responsabilidad social de trabajar por el bien común, por el bien de todos. El PRI estará siempre dispuesto a sumar y a unir esfuerzos para sacar adelante reformas y concretar las ya existentes.

Ciudad de México.- En el marco de la glosa del Tercer Informe del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, la diputada federal por Oaxaca, Mariana Benítez Tiburcio, fijó la postura del Partido Revolucionario Institucional en materia de Política Interior; “El país clama justicia, demanda paz y esperanza. No podemos rehusar a nuestra responsabilidad social de trabajar por el bien común, por el bien de todos”, aseveró.

Al hacer uso de la tribuna en la Cámara Baja del Congreso de la Unión, Benítez Tiburcio resaltó que devolver la paz y la tranquilidad a las familias mexicanas, brindarles seguridad, generar confianza y certezas, garantizando a toda persona una vida con respeto a sus derechos humanos, son las metas que el Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto se ha fijado como prioritarias desde el inicio de su gestión.

La abogada oaxaqueña recordó que en el inicio de este sexenio los mexicanos veníamos de padecer una política errática de seguridad que generó más violencia y muertes, presenciar daños que llamaron “colaterales” cuyas víctimas directas fueron personas inocentes, y ahondó, “vivimos una estrategia de desencuentros y falta de coordinación entre autoridades federales y estatales, de 2006 a 2012 tuvimos un gobierno donde los derechos humanos no figuraron en la agenda prioritaria, como tampoco importó  fortalecer las áreas de inteligencia ni las instituciones de procuración de justicia”.

“A su llegada, el Gobierno de la República le dio entonces un nuevo rostro a la política de seguridad y justicia invirtiendo recursos nunca antes vistos, 392 mil millones de pesos a la política de prevención del  delito, trabajando en sus causas y orígenes, regionalizando la atención de los delitos de mayor impacto en la sociedad, creando la Gendarmería y priorizando la coordinación y corresponsabilidad entre las autoridades de todos los órdenes de gobierno”, enfatizó la legisladora oaxaqueña Mariana Benítez.

Benítez Tiburcio agregó que en los primeros dos años de este gobierno, se logró reducir la tasa de homicidios a nivel nacional en casi 26%, más baja que en Brasil, Colombia y Venezuela. Pero más allá de cifras, lo importante es que en regiones del país afectadas por la delincuencia, las familias han regresado a sus calles y parques.

Con la Estrategia Nacional Antisecuestro, en el primer semestre de 2015, el número de denuncias por este delito bajó 31%. Así también se ha venido impulsando con compromiso y liderazgo la verdadera transformación del Nuevo Sistema de Justicia Penal, se logró expedir el Código Nacional de Procedimientos Penales, una Ley Nacional de Mecanismos Alternativos de Solución de Controversias, y está a punto de concretarse una agenda que armonice la legislación necesaria para implementar esta reforma.

Ante el pleno de la LXIII Legislatura del Congreso de la Unión la legisladora tricolor subrayó que este gobierno ha priorizado la generación de acuerdos y sinergias con instancias nacionales e internacionales que permitan avanzar en la agenda de derechos humanos pendiente en el país, destacando logros como la expedición de la Ley General de Víctimas, así como la elaboración de un protocolo de actuación para la búsqueda de personas desaparecidas, y uno más orientado a la homologación para la investigación de tortura, así como la unión de esfuerzos para el proyecto de Ley para la búsqueda de personas no localizadas y desaparición forzada.

Mariana Benítez Tiburcio fue contundente al señalar: “México está atravesado por grandes retos. En el último año el país ha enfrentado sucesos dolorosos y frustrantes que han dejado heridas profundas y un sentimiento de vulnerabilidad, por ello es imperativo y urgente que el país entero se aboque a trabajar en combatir la corrupción, la violencia y la impunidad, pero también la pobreza y la falta de oportunidades”.

Y continuó, “Es necesario hacer a un lado las mezquindades que llevan a algunos a buscar más que su triunfo, el fracaso del Gobierno, y con ello del Estado Mexicano. Las heridas que hoy tenemos no se abrieron hoy, ni hace 3 años. Lo que sí surgió hace tres años, es una voluntad férrea por encarar estos desafíos desde la raíz, es decir desde la cultura y la educación desde la inclusión, la innovación y el desarrollo humano y social”.

“México clama justicia, demanda paz y esperanza. No podemos rehusar a nuestra responsabilidad social de trabajar por el bien común, por el bien de todos. El PRI estará siempre dispuesto a sumar y a unir esfuerzos para sacar adelante reformas y concretar las ya existentes. Confiamos en que las coincidencias nos harán trabajar por México”.