Josefina y la economía: Isaac Leobardo Sánchez Juárez*

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En esta última edición de la serie de análisis sobre las propuestas de los candidatos a la presidencia de México le toca el turno a la Licenciada Josefina Vázquez Mota (JVM). Iniciaré suponiendo que representa los intereses y las ideas del actual presidente de la República, por lo tanto analizaré la política económica vigente y con ello espero darle a usted amable lector una idea de lo que se espera de este personaje en caso de ganar las elecciones del próximo mes de julio.

 

Se debe reconocer que durante los últimos 12 años en materia macroeconómica ha existido estabilidad, que México es una de las pocas naciones que cuenta con fundamentales -reservas internacionales por 154,224 millones de dólares- que le han permitido salvar con relativo éxito los más recientes choques internacionales. Me parece que a nivel macroeconómico se ha observado un manejo responsable de la economía, particularmente de las finanzas (bajos niveles de deuda pública federal, alrededor de 33% del PIB). Desafortunadamente el tipo de política instrumentada ha contribuido a ralentizar el crecimiento económico y con ello la creación de empleos.

De ganar JVM ofrece que mantendrá la estabilidad, lo que es muy bueno, ya que ello asegura la inversión y el valor del ingreso de las familias (baja inflación). La estabilidad macroeconómica sin duda debe mantenerse, pero también tiene que trabajarse para traducirla en beneficios para los ciudadanos (crecimiento y empleo). Lo anterior implica modificar la política macroeconómica, pasar de una etapa de estancamiento estabilizador a una de crecimiento estabilizador.

De acuerdo con Gerardo Esquivel, profesor de El Colegio de México, durante los últimos años se han realizado tres acciones cruciales para entender la política macroeconómica moderna: el Tratado Libre Comercio de América del Norte, el esquema de objetivos de inflación del Banco de México y la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.  

El TLCAN ha creado una relación cercana entre el ciclo económico de México y el de los EE.UU. Esto explica la dependencia de la economía mexicana respecto a la norteamericana, así como las fluctuaciones a las que ha estado sometida. Debido a esto es que la economía nacional se desaceleró a partir de finales del año 2000, justo cuando la americana estaba entrando en un periodo recesivo. Algo similar ocurrió con la crisis financiera iniciada en diciembre de 2007. Por lo anterior, la recomendación es diversificar nuestro comercio, incrementar nuestras exportaciones hacia destinos como Europa, Asia y particularmente América Latina.

Ahora bien, la política monetaria que se ha seguido de objetivos de inflación permite establecer medidas concretas ante riesgos inflacionarios en el país. Pero a decir de Esquivel (2010), la creciente integración de los ciclos de México y EE.UU. no se acompaña de una integración de la política monetaria y los bancos centrales responden de forma diferente ante un choque. Por ejemplo, en la reciente crisis en EE.UU. la reserva federal redujo las tasas de interés, pero el Banco de México no lo hizo, de hecho existe probabilidad de que lo haga, pero apenas ahora y no es seguro que se lleve a cabo. Lo anterior tiene como resultado fluctuaciones significativas en los diferenciales de tasas de interés y de aquí en el tipo de cambio o reservas internacionales.

Si las tasas de interés son más elevadas en el país que en los EE.UU. se puede generar una apreciación de la moneda nacional y un cambio desfavorable en los precios relativos, lo que termina agudizando los efectos negativos de un choque recesivo en la economía de nuestro vecino del norte. Con lo que la política monetaria vigente, aunque genera estabilidad promueve ciertos riesgos al no estar sincronizada con la de nuestro principal socio comercial. Otro efecto desestabilizador adicional es que un aumento en los diferenciales de las tasas de interés incrementa los incentivos para mayores flujos de capital en cartera, que por su naturaleza son volátiles y generan presiones en el tipo de cambio.

Respecto a la ley de presupuesto equilibrado, debe decirse que este tipo de medida es de carácter pro-cíclico y deja pocas opciones a las autoridades en caso de choques externos. La iniciativa de presupuesto equilibrado tiende a exacerbar la dirección de la fase del ciclo económico en la que un país se encuentra (expansión vs recesión). Por ejemplo, si estamos en una etapa recesiva, la actividad económica se está contrayendo y con ella los ingresos del gobierno. Si el gobierno ajusta a la baja su gasto para mantener el presupuesto en equilibrio, la recesión se magnifica. Ocurre lo contrario cuando estamos en una fase expansiva. La recomendación aquí es cambiar la política fiscal para reaccionar de forma contra-cíclica, aprovechando que la estabilidad macroeconómica se ha alcanzado. Lo anterior implica básicamente aumentar el gasto público en recesiones y reducirlo en expansiones.

Respecto a ésta última recomendación se debe tener mucho cuidado, ya que en el pasado el exceso del gasto público condujo a crisis e inestabilidad, precisamente aquello que se quería evitar. El presupuesto debe manejarse de forma responsable y el gasto dirigirse hacia acciones que tengan un claro efecto multiplicador como son las obras de infraestructura y el mantenimiento de la existente. Otra opción respecto a la actual política fiscal pro-cíclica es mantener una política neutral, en la que independientemente de los acontecimientos, el gasto público se mantiene constante; es decir, ni se incrementa, ni se reduce (considerando que sus efectos sobre la economía pueden ser ambiguos).

Dicho lo anterior, me parece que de ganar JVM se mantendría la política fiscal pro-cíclica, y la política monetaria de objetivos de inflación, promoviéndose la estabilidad, pero se continuaría sacrificando el crecimiento económico. Esto al menos desde el punto de vista macroeconómico. Considero que para aumentar las tasas de crecimiento es necesario relajar la política fiscal y monetaria, básicamente reducir las tasas de interés para que se dé un mayor impulso a la inversión, así como elevar el gasto público en obras que son cruciales para el país como la construcción de carreteras, vías férreas, puertos y aeropuertos.

En un documento público de JVM en relación a sus propuestas económicas, indica que de ganar mantendría la estabilidad, lo que refuerza mi comentario anterior. En ese mismo documento indica que además propondría reformas para una mayor flexibilidad laboral ya que la actual legislación de 1970 es obsoleta e impide la creación de empleos y genera diversas rigideces en el mercado. También propone mejorar la capacitación para el empleo, fortalecer las incubadoras de empresas, crear el observatorio de pertinencia educativa, financiar proyectos viables, realizar convenios con empresas para la inserción laboral y promover la descentralización de las actividades científicas y tecnológicas.

Otras propuestas de JVM son: fomentar la productividad, particularmente en las pequeñas y medianas empresas; mejorar la seguridad jurídica; continuar la desregulación y contribuir  al desarrollo de sectores específicos tales como turismo, agricultura, minería y energía. De especial importancia es su propuesta para la creación de corredores productivos. Respecto a esto propone consolidar el clúster de la industria aeronáutica en la zona del bajío, fortalecer la frontera norte de México en materia industrial, incentivar los sectores automotrices, de software y electrodomésticos. Finalmente propone la creación de ideágoras y plataformas virtuales para desarrollar un inventario en tiempo real de problemas y soluciones basadas en la innovación para la mejora de la productividad.

Estimado lector, con esto termino esta serie de artículos de difusión, los cuales espero le ayuden a tomar una mejor decisión de voto. Decida usted que candidato es el mejor, quien representa un mayor bienestar para su economía personal. En las próximas ediciones seguiré presentándole mis comentarios, ya sin nombres y partidos, para ayudarle a seguir construyendo un depósito de conocimientos útiles. Le exhorto a seguir trabajando por un México pacífico, democrático y competitivo.

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* Profesor en economía de la UACJ, Miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI)

Esquivel, Gerardo. 2010. “De la inestabilidad macroeconómica al estancamiento estabilizador: el papel del diseño y la conducción de la política económica”. En Lustig, Nora (comp.). Los grandes problemas de México. Crecimiento económico y equidad. Distrito Federal: El Colegio de México.