El banco del Vaticano: Mario Arturo Mendoza Flores

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El pasado viernes; aparecieron publicadas las oportunas declaraciones del Subsecretario de Bienestar Económico del gobierno del estado, Othón Cuevas; alertando sobre un posible engaño a diversos municipios por parte de una Fundación denominada “El banco del Vaticano”. Si alguien sabe sobre este tema, sin duda que lo es el ex diputado federal y ex Secretario de la Comisión de Economía Social del la LX legislatura, así como ex coordinador Latinoamericano de Economía Solidaria del Organismo No Gubernamental “Movimiento Obrero Católico”. Por cierto ya existe la amenaza de una demanda penal en contra de Othón Cuevas como consecuencia de las declaraciones vertidas, situación que para nada le quita el sueño.

 

Antes amable lector, le agradeceré que si usted tiene relación con algún Presidente Municipal o concejal de algún municipio del estado le alerte sobre lo que aquí mencionaremos, lo que sin duda podrá evitarles muchos dolores de cabeza. La forma de operar es la siguiente: llega hasta las oficinas de la Presidencia Municipal una persona a la que sólo mencionan como el Licenciado “Valladolid” quien se ostenta como representante en el estado del llamado “Banco del Vaticano”. Una vez que concretan la cita con el Presidente Municipal le ofrecen un esquema de financiamiento sumamente atractivo, casi casi como un regalo caído del cielo; pues les garantizan poderles otorgar recursos que van desde los 180 hasta los 500 millones de pesos, todo mediante la firma de un contrato redactado en inglés en donde se acepta la legislación de un país europeo. Para esto les comentan que dichos recursos son para combatir la pobreza y que es un apoyo solidario del Vaticano para con la gente más pobre y que por lo tanto el costo del financiamiento es casi nulo. Por supuesto que para motivar a los Concejales les prometen que si acceden a la firma del contrato, como beneficio adicional serán llevados a Austria para que conozcan cómo opera dicha Fundación…¿Qué no lo adecuado sería  que los lleven al Vaticano?.

Hasta aquí todo aparentemente va bien, lo “raro” viene después.

 

Como se trata de una inversión en “beneficio” de los más pobres y es una muestra de solidaridad del “Banco del Vaticano” con el municipio en referencia, el Ayuntamiento tiene que entrarle con una aportación equivalente al 20 por ciento del monto total, esto es, si se le autoriza un préstamo de 180 millones de pesos, el municipio debe depositar 36 millones en un banco extranjero. Uno de los requisitos indispensables es que aprueben dicha mezcla de recursos e incluso se les obliga a aceptar que estos deben ser cubiertos se les autorice o no dicho financiamiento. Nos informan quienes ya han podido acceder a dicho contrato, que además de que viene redactado en inglés, muy al estilo mexicano eso sí, con letras pequeñitas se establece que el costo de la “asesoría y del trámite” será del 15 por ciento, o sea que de la aportación que debe realizar el ayuntamiento, sirve para cubrir los gastos de tan nobles promotores del crédito. Por supuesto que dicho costo se convierte en una obligación, se acceda o no al crédito.

 

Seguramente amable lector, usted se preguntará como me lo pregunté yo, ¿y aún así algunos Ayuntamientos se atreven a firmar?, la respuesta es ¡sí!, incluso ha trascendido que ya el primer paquete con 10 municipios está próximo a tramitarse. Y es que comentan que como la mayoría de los Ayuntamientos recién acaban de asumir el mandato y ante la carencia de suficientes recursos para desarrollar obras que beneficien a sus gobernados y ante lo atractivo de lo que les proponen, pues caen en la tentación de hacerse de una manera “fácil” de recursos que aparentemente son un regalo. Los expertos en el tema, me comentan que ésta fundación se aprovecha del prestigio y gran ayuda humanitaria que han proporcionado al estado Fundaciones de renombre y con reconocimiento mundial como la Kellog´s, Cáritas Internacional, Manos Unidas de España, IAF, María Trinitaria, Harp Helú y otras más que han hecho de la solidaridad internacional y nacional una forma desinteresada de sostén al más desprotegido. Sin duda que el soporte de las fundaciones es vital para nuestro estado, de ahí que se le haya conferido esa responsabilidad a Jaime Bolaños Cacho para alentar ese tipo de apoyos.

 

Como el nombre del Vaticano de inmediato se relaciona con la Jerarquía Católica, se preguntó en la Curia si ellos tenían relación con ésta fundación; su respuesta fue en el sentido de que en los próximos días, quizá martes o miércoles, publiquen un desplegado manifestando su postura, mientras aseguran que los recursos que provienen del Vaticano, necesariamente deben pasar por la Nunciatura, la que a su vez lo hace llegar a través de la Diócesis  con la intervención de los Obispos, por lo que no certifican a dicha fundación. Por lo pronto pone a disposición de los Ayuntamientos los teléfonos 51 648 22 y 51 655 80 para que los Concejales puedan consultarles cualquier duda al respecto.

 

La mejor manera de evitar cualquier situación que pueda generarle un quebranto a los Ayuntamientos, es que dicha fundación aclare a plenitud sobre su constitución, origen de sus recursos, exhiba una muestra en español del contrato al que se obliga a firmar a los municipios, proporcione la ubicación de sus oficinas y su organigrama, así como los resultados obtenidos en otras latitudes donde ya esté operando este esquema de financiamiento, que explique el por qué se les pide a los interesados depositen en un banco extranjero y no en uno nacional la aportación inicial solicitada. Como ya lo dije anteriormente, si un estado ha sido beneficiado con la solidaridad de las Fundaciones, ese estado es Oaxaca; sólo que su forma de operar ha sido totalmente transparente y responsable, y eso mismo es lo que se les está pidiendo a ellos. Su forma de reaccionar amenazando con poner demandas penales no es la mejor forma de aclarar las cosas y sí en cambio viene a confirmar que son expertos en procesos legales, como los que se podrían derivar si los Presidentes Municipales aceptan firmar el contrato que les exhiben como parte inicial del procedimiento.

 

Ya la iglesia Católica fijará su postura.