Del Zócalo a los Pinos: Raúl Castellanos

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maduo“SÍ… ESTOY LOCO COMO UNA CABRA” –Nicolás Maduro dixit-; y agregó “es verdad estoy loco de amor por Venezuela, por la Revolución Bolivariana, por Chávez y su ejemplo”; las expresiones fueron en respuesta a lo declarado por el ex presidente de Uruguay José Mujica, quien al ser cuestionado sobre las recientes decisiones políticas y jurídicas de Maduro para impedir la realización del Referéndum Revocatorio aprobado por la Asamblea Nacional de Venezuela y el diferendo epistolar y mediático que mantiene con Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos, expresó “siento gran respeto y aprecio por Maduro, pero está loco como una cabra”; por supuesto Maduro se cuidó –como se advierte- de no comprar pleito con el icónico líder latinoamericano, el único que al terminar su mandato, lo hizo con una aprobación popular superior al 78%; paradojas de la grilla, las visiones y los intereses en juego, Luis Almagro y Nicolás Maduro mantuvieron una estrecha relación cuando ambos se desempeñaron como Cancilleres de sus gobiernos, Almagro de José Mujica y Maduro de Hugo Chávez; el día que Almagro fue electo en marzo del año pasado Secretario General de la OEA, Delcy Rodríguez, la actual responsable de la diplomacia venezolana publicó un mensaje “saludamos la elección del nuevo secretario general de la OEA, ex canciller de Uruguay, ¡su nombre dará nuevo espíritu a la organización!”; sin embargo, difícilmente las relaciones podían marchar como Maduro las condiciona, sujetas a sus exabruptos, ocurrencias y violaciones a los derechos humanos de sus opositores; Almagro, reconocido como un demócrata, muy en la línea de Mujica, en principio trato de abrir espacios de interlocución entre el gobierno de Maduro y los integrantes de la opositora MUD –Mesa de la Unidad Democrática-, la intransigencia del que recibe orientación del “pajarito” –el espíritu de Chávez- lo impidió; así llego el primer punto de quiebre, en octubre del 2015, Almagro recibió en la sede de la organización a las esposas de los líderes encarcelados –por Maduro- Leopoldo López, Antonio Ledezma y Daniel Ceballos, luego en noviembre, la OEA expresó ante el Consejo Nacional Electoral de Venezuela su preocupación por la forma como se estaba llevando a cabo el proceso electoral de renovación de la Asamblea Nacional, que finalmente, a pesar de todos las argucias –del gobierno bolivariano- llevó a la oposición a alcanzar la mayoría calificada, que también fue boicoteada por el Supremo Tribunal de Justicia controlado por Maduro y ya en el deterioro cuasi total de la relación, Almagro se pronunció a favor de la Ley de Amnistía, también vetada desde el Palacio de Miraflores; así llegamos a los tiempos actuales, aprobado por la Asamblea Nacional un referéndum revocatorio del mandato de Maduro, Almagro se pronunció a favor de su realización, la respuesta de Maduro fue de total descalificación, en conferencia de prensa acusó a Luis Almagro de ser agente de la CIA y un traidor desde hace tiempo, con su peculiar estilo expresó “algún día contaré su historia…fue una jugada maestra que hicieron los gringos, la CIA, con su agente, Almagro, yo sé todo, lo conozco muy bien, sé sus secretos” y concluyó invocando a los espíritus malignos “¡te secarás Almagro! ¡estás seco!”; la respuesta no tardó, en inglés, español y “lenguas muertas” –Chicoche dixit- Almagro reviró contundente y en un tono poco usual en el lenguaje diplomático “no soy agente de la CIA y tu mentira, aunque repetida mil veces, nunca será verdad…no soy traidor pero tú si lo eres, Presidente, traicionas a tu pueblo y a tu supuesta ideología con tus diatribas sin contenido, eres traidor de la ética de la política con tus mentiras y traicionas el principio más sagrado de la política, que es someterte al escrutinio de tu pueblo…tú tienes un imperativo de decencia pública de hacer el referéndum revocatorio en este 2016, porque cuando la política está polarizada la decisión debe volver al pueblo, eso es lo que tu Constitución dice, negar la consulta al pueblo, negarle la posibilidad de decidir, te transforma en un dictadorzuelo más, como los tantos que ha tenido el continente”; Maduro respondió “la única dictadura que hay en Venezuela es la de las conspiraciones”; finalmente Henrique Capriles, ex candidato presidencial y uno de los más agudos opositores a Maduro resumió lo que parece una verdad absoluta “Maduro prefiere un golpe de estado –por los militares- antes que someterse a una consulta revocatoria democrática”…¿alguien puede asegurara que esto ya está decidido?…¡5 años de resistencia…ya solo faltan 189 días para que Gabino Cué pase a ocupar su lugar en el basurero de la historia!…

RAÚL CASTELLANOS HERNÁNDEZ /@rcperseguido