Con música, celebran restauración de retablo de San Felipe Neri

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Con la presentación del Coro de la Ciudad, la Regiduría de Cultura, Deporte y Fomento Educativo del Municipio de Oaxaca de Juárez realizó la entrega simbólica de la primera etapa del proyecto de restauración profesional del retablo principal del Templo de San Felipe Neri, ubicado en el Centro Histórico.

La obra que data del siglo XVIII, fue restaurada a través del Fondo de Apoyo a Comunidades para la Restauración de Monumentos Históricos y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (Foremoba) y el Instituto del Patrimonio Cultural del Gobierno del Estado (Inpac), gracias a la gestión que realizó la concejal Amanda Avendaño Castellanos Cházari.

Junto a la presidenta honoraria del DIF Municipal, María de los Ángeles Martínez Arnaud y en presencia del párroco del templo, Aristeo de la Vega Cacho, la regidora resaltó la importancia de rescatar la obra que forma parte del patrimonio histórico de Oaxaca.

 “Los trabajos eran primordiales, ya que el retablo forma parte del patrimonio de la humanidad, pero sobre todo de las y los oaxaqueños, verdaderos depositarios de esta bellísima obra de arte”, dijo.

Luego de agradecer a quienes se congregaron en el templo, la confianza depositada en la presente administración, la regidora presentó al Coro de la Ciudad, ensamble que ha lucido por 23 años en la vida artística de Oaxaca, actualmente dirigido por el maestro Israel David Rivera Cañas, quien tuvo como invitado al maestro Óscar Rafael Martínez García, interpretando un programa rico en composiciones sacras y villancicos que fulguraron con los matices de las y los integrantes del coro.

El acto cultural desarrollado  en este templo histórico donde contrajo matrimonio Don Benito Juárez con Doña Margarita Maza, el 31 de julio de 1843, concluyó con los aplausos de la concurrencia.

La restauración

La primera etapa de restauración de la obra requirió una inversión de los tres niveles de gobierno, que ascendió a un millón 500 mil pesos y consistió en los trabajos de limpieza para la eliminación de polvo y materiales ajenos al retablo, fumigación, desmontaje de las 11 obras escultóricas que pertenecen al retablo barroco y la eliminación de intervenciones anteriores, como el cambio de cableado eléctrico en malas condiciones, clavos, tornillos, entre otras piezas.

Asimismo, se realizó la limpieza químico-física de la superficie original, tanto de hoja de oro como de estratos pictóricos; resane y reposición de faltantes de madera; así como la reintegración de hoja de oro en faltantes, la recuperación del color original de las puertas del retablo, entre otros trabajos.

También se atendió una ligera inclinación que presentaba la calle central del retablo, ya que ante los constantes movimientos telúricos podría provocar su desplome hacia el frente, y se regresó la pieza escultórica de San Felipe Neri a su lugar original.