Chávez y Evo culpan a EU de sublevación

Print Friendly, PDF & Email

El presidente venezolano, Hugo Chávez, y su par boliviano, Evo Morales, coincidieron en afirmar que EU estuvo detrás de la sublevación de policías contra el mandatario ecuatoriano, Rafael Correa.

“Debemos exigirle al gobierno de los Estados Unidos que no siga metiendo sus viejas manos imperiales en este continente”, afirmó Chávez al concluir la reunión de emergencia de Unasur en Buenos Aires.

Destacó que Washington actúa “financiando con millones y millones de dólares a movimientos de la extrema derecha, muchos de los cuales andan conspirando para desestabilizar a los gobiernos de los países de la Alianza Bolivariana”.

Por su parte, Morales acusó al “departamento de Estado de los Estados Unidos” de “gestar” la sublevación contra Correa.

En ese marco de acusaciones contra Washington, la secretaria de Estado de la Unión Americana, Hillary Clinton, habló telefónicamente con Correa para reiterarle su respaldo.

Durante una conversación de 10 minutos, Clinton le “exhortó a un restablecimiento (de la normalidad en Ecuador) continuo, rápido y pacífico”, informó el portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley.

Mientras tanto, Ecuador retomaba la calma tras la rebelión de unos 600 policías —según el gobierno— y 2,300 de acuerdo con una fuente cercana a la protesta, que dejó ocho muertos y 274 heridos, y que lo mantuvo en vilo a raíz del secuestro y posterior rescate militar del presidente, quien estuvo retenido varias horas por sublevados en un hospital.

Tres de los fallecimientos se produjeron en Quito y los restantes en Guayaquil, afirmó el ministerio de Salud, precisando que las víctimas fueron dos policías y seis civiles.

El país, que por orden del gobierno cumple tres días de duelo, está bajo el estado de excepción que faculta a los militares a patrullar las calles. “Hay calma en el país y calma en los cuarteles de policía”, declaró el ministro de Interior, Gustavo Jalkh.

El viceministro de Interior, Edwin Jarrín, manifestó que “no hubo una rebelión de la policía. Fue una sublevación de unos pocos” y apuntó que no hay detenidos a causa de la protesta, que se inició en Quito y se extendió a cuarteles de cinco de las 24 provincias del país.

La Fiscalía de la Nación inició una investigación para determinar a los responsables, que según el gobierno habían estado liderados por personas infiltradas en las tropas y afines al ex presidente Lucio Gutiérrez.

El mandatario socialista, quien laboraba en la casa de gobierno acordonada por soldados con fusiles, tildó de “intento de golpe de Estado” al desorden, por el cual el comandante de la policía, general Freddy Martínez, renunció. El general Fausto Franco asumió el mando. Franco fue designado por Correa, quien anunció una depuración de la policía.

Martínez afirmó que la institución vive una “relativa calma”, y estimó que el jueves “fue un día lamentable, crítico, caótico, pues estaba de por medio la seguridad del presidente”.

Estimó que en la protesta hubo “infiltración de gente interesada en desestabilizar a la policía”, que cuenta con unos 40 mil miembros. Asimismo, planteó al gobierno que revise la ley “que causó esta serie de desatinos”, pues los uniformados consideran que les quitará beneficios económicos.

Claves

OEA y Unasur apoyan

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, recibió anoche el respaldo del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y de los cancilleres de varios países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en Quito.

El ex presidente de Ecuador Lucio Gutiérrez rechazó ayer las acusaciones de Correa sobre su influencia en la sublevación. “son falsas y temerarias. Siempre me echa la culpa de todo… El gran culpable de este episodio doloroso que ocurrió en Ecuador es Rafael Correa, porque su gobierno es abusivo”, dijo al diario brasileño Folha de Sao Paulo.

Agencias