Bomberos en alerta máxima para atender las contingencias que se registren por la situación climatológica

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El director del Heroico Cuerpo de Bomberos en Oaxaca, Manuel Maza Sánchez, informó que la situación en Oaxaca por lo que ocurre climatológicamente es crítica.

Ya que las fuertes lluvias y los frentes fríos, ponen en riesgo a todas aquellas personas que viven en terrenos irregulares o que no están consolidados, así como en laderas, pendientes o a un lado de arroyos o bajada de ríos.

Comentó, que la temporada de lluvias concluirá hasta finales de noviembre, y que hasta el momento esto  ha dejado 6 muertos en la zona Mixe.

Precisó, que  los frentes fríos que iniciaron el pasado 15 de octubre y concluirán hasta marzo, traerán complicaciones en al menos 48 comunidades que están por encima de un determinado número de metros sobre el nivel del mar.

Señaló, que la mayoría de los municipios en donde se presentarán descensos de  temperaturas extremas no se encuentran preparados, ya que sus autoridades no han tomado previsiones ni creado albergues, derivado a que no se  han acercado a las dependencias correspondientes.

Manifestó, que es urgente que los ayuntamientos pidan la asesoría de cómo actuar ante una contingencia natural, a la par de que precisó, que el área de bomberos participa en el  plan estatal de auxilio a la población  que coordinan los tres niveles de gobierno.

Comentó, que las regiones en donde han sido recurrentes los daños como inundaciones, encharcamientos, deslaves, desgajamientos y  pérdidas materiales y humanas  son: el Istmo de Tehuantepec, la Costa y la Sierra Norte.

“Llevamos 96 horas de lluvias contantes, 3 deslaves en la carretera Oaxaca-Tuxtepec, y la presencia de frentes fríos, por tal motivo nos encontramos en alerta máxima para actuar a dónde se nos llame” expresó.

Finalmente Maza Sánchez, exhortó a la población y a las autoridades municipales a seguir las recomendaciones de protección civil y no confiarse en que no pasa nada, toda vez de que precisó que las lluvias y los fríos son benéficos pero también traen consecuencias cuando las familias están viviendo en zonas de riesgo.

Diana Méndez