Ayer le tocó a Filadelfo Sánchez Sarmiento: Horacio Corro Espinosa

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filadelfoNo cabe duda que el oficio del periodista es uno de los más peligrosos de México. Primero, porque no tenemos ninguna garantía de seguridad por parte de las autoridades, y luego, porque muchas veces, son ellas mismas las que inician la persecución contra los mismos informadores.

Esto no es ninguna opinión al ahí se va, así lo aseguran legisladores, académicos, investigadores, organizaciones independientes y defensores de los derechos humanos. Entonces, sobre esa información no hay duda de que las garantías para la actividad periodística en México, prácticamente no existen.

A diario recibimos alguna mala noticia sucedida a algún comunicador. Si no son desapariciones, son amenazas, intimidaciones, detenciones arbitrarias, homicidios… la lista es larga.

Ayer no fue la excepción. Ayer le cumplieron la sentencia que desde hace más de un año le habían hecho. Ayer fue asesinado en Miahuatlán de Porfirio Díaz, el periodista y locutor Filadelfo Sánchez Sarmiento.

Oaxaca es una de las entidades más peligrosas para ejercer el periodismo en México. En lo que va de 2015, Article 19, ha documentado al menos 20 agresiones contra periodistas en el estado.

De acuerdo a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), informa que Filadelfo, apenas salía a la calle después de concluir su noticiero, a eso de las 9:30 de la mañana, cuando fue atacado a tiros por dos sujetos que lo privaron de la vida. 

Muchos conocimos personalmente a Filadelfo, o escuchamos su voz y su nombre a través de los aparatos de radio. El estuvo trabajando varios años en la estación de radio de Huajuapan de León, de ahí, en el periodo municipal del licenciado Javier Mendoza Aroche, se desempeñó como director de comunicación social de ese ayuntamiento. Después, se fue a trabajar a otras estaciones de radio de la capital oaxaqueña, y de ahí tomó camino a Miahuatlán, donde trabajó durante otros años en la estación de radio La Consentida 103. 3 FM.

Siempre que hay ese tipo de casos, los políticos dicen: “que se aplique la ley”. Con esas palabras parece que tratan de decir que las leyes son mágicas y que por sí solas pueden resolver cualquier asunto. Es por eso que en todo México impera la impunidad.

El gobernador de Oaxaca Gabino Cué, ordenó una investigación diligente para ubicar y detener a los homicidas del periodista.

¿Y qué va a pasar ahora? La violencia va a seguir contra los periodistas, nadie la va detener. Es difícil que con la muerte del compañero Filadelfo Sánchez Sarmiento, disminuya el número de agresiones. Todo seguirá a su ritmo normal: la impunidad. Por la impunidad continuará la libertad para agredir a los periodistas.

En el mes de octubre del año pasado, di a conocer el nombre de un periodista: Chevedo Blas, compañero de trabajo de Filadelfo, quien fue amenazado de muerte por el hermano del presidente municipal de ese lugar, Marcos Ramírez.

Las amenazas eran porque, según el agresor, insultaba en la radio y sin ningún fundamento, a su hermano el presidente.

En varias ocasiones di a conocer las amenazas que recibían algunos periodistas de Miahuatlán. Entre ellas estaban las dirigidas telefónicamente al compañero Filadelfo.

A pesar de las denuncias que hice, nunca prosperaron, sólo quedaron registradas para cuando se concretarán. Ayer fue el día, Filadelfo llegó a su fin de una manera violenta. Y a partir de ayer jueves, la autoridad correspondiente hará como que trabaja en el caso. En eso quedará todo.

Twitter: @horaciocorro

Facebook: Horacio Corro

horaciocorro@yahoo.com.mx